HISTORIA DE LO INMEDIATO

La guerra Sheinbaum-Ebrard

La derrota de Morena en las alcaldías debilita políticamente a Claudia ante Marcelo, quien fue el constructor de la Línea 12 del Metro

OPINIÓN

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Álvaro Delgado / Historia de lo Inmediato / Opinión El Heraldo de México

En paralelo al proceso electoral que le dio a la coalición del presidente Andrés Manuel López Obrador la mayoría en la Cámara de Diputados y 10 nuevas gubernaturas, que con las seis previas controla la mitad del territorio nacional, hubo una guerra soterrada entre Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard por la candidatura presidencial, que emerge ahora con las causas de la tragedia de la Línea 12 del Metro.

Esta guerra, que Ebrard públicamente declaró este lunes, al anunciar que combatirá la “intencionalidad política” del reportaje de The New York Times y del peritaje del gobierno de Sheinbaum sobre la Línea 12, no es sólo entre ambos en Morena, sino que involucra al magnate Carlos Slim, constructor del tramo elevado, cuyo derrumbe dejó 26 muertos, y que puede quedar inservible por haber sido mal construido.

Y otro actor estratégico en la guerra es el Partido Verde Ecologista de México, con el que Ebrard tiene una estrecha relación y representación con su operador financiero Javier López Casarín, con cuyos votos Morena hace mayoría en la Cámara de Diputados y que, eventualmente en el futuro, podría mudarla a la coalición del PRIAN.

Manuel Velasco Coello, uno de los dueños del PVEM, es el operador de la alianza con Morena, cuyo presidente, Mario Delgado, trabaja para el proyecto presidencial de Ebrard, quien vio nacer al Verde bajo el impulso de su jefe político, Manuel Camacho Solís, y del que fue diputado federal en 1997.

El resultado de la elección en el país contrastó con el de la Ciudad de México, porque Sheinbaum vio perder a Morena seis alcaldías, incluidas las estratégicas: Cuauhtémoc, donde se asientan los tres poderes del Estado, y Tlalpan, su enclave desde la que llegó a la jefatura de Gobierno.

La derrota de Sheinbaum no fue sólo territorial –incluída Miguel Hidalgo, que concentra las colonias donde viven los millonarios, y Coyoacán–, sino en figuras de la izquierda: perdieron Pablo Gómez, Alfonso Ramírez Cuéllar y Javier Hidalgo, definidos como “puros” por los expriistas como Ricardo Monreal, quien celebró el triunfo de Sandra Cuevas, del PRIAN, como suyo.

Aunque no perdió la mayoría en el Congreso, la derrota de Morena en las alcaldías debilita políticamente a Sheinbaum ante Ebrard, quien fue el constructor de la Línea 12 del Metro y cuyo peritaje sobre la tragedia del 3 de mayo, un mes antes de las elecciones, determinará las responsabilidades.

El reportaje del Times apunta a que la obra, sobre todo en el Viaducto elevado donde se produjo el desplome del tren, estuvo mal hecha desde el origen y, además de Ebrard, la responsabilidad apunta a Ideal, la constructora de Slim que deberá no sólo indemnizar al gobierno de la capital, sino a las víctimas.

Y mientras Sheinbaum y Ebrard atizan la guerra, al tercer involucrado, Miguel Ángel Mancera, lo acoge su amigo Monreal, quien agrupa a todos los enemigos de la jefa de Gobierno. Pero podría no ser ni una ni otro: López Obrador ya dijo que tiene prospectos “hasta para prestar” a la oposición.

POR ÁLVARO DELGADO
ALVARO.DELGADO@PROCESO.COM.MX
@ALVARO_DELGADO

dza