En México, la pandemia por COVID-19 embistió fuerte, después de cuatro décadas de políticas neoliberales. Más que una crisis médica, estamos frente a una crisis social, política e ideológica.
Los intentos de gobiernos anteriores por "desmantelar" la salud pública, bajo una ideología de "capitalismo neoliberal" es una pandemia subyacente que ocasionó falta de insumos, equipamiento, personal de salud y una "indiferencia creciente hacia la vida humana".
La pandemia vino a desnudar el poder de un "neoliberalismo brutal", el cual es necesario detener para poder superar la crisis. Hasta los más férreos defensores del modelo neoliberal se han dado cuenta de que si se quiere salir lo más rápido de esta crisis mundial, es necesario que el Estado sea quien promueva el bien público, la solidaridad democrática, suba el gasto público en salud y apoye una recuperación económica acelerada sin depender tanto de la "eficiencia superior" del mercado.
El sostenimiento por décadas de la ideología de un Estado mínimo, condujo a un deterioro ambiental, hipótesis de la probable causa zoonótica del brote del virus SARS COV-2.
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El abandono de las funciones sociales del Estado propició la informalidad, empleos precarios y condiciones de hacinamiento habitacional, lo que hizo imposible el aislamiento social que supone la cuarentena. Las reglas del juego neoliberal impuestas al big pharma, aunado al "nacionalismo de producción", ocasionó que las grandes compañías optaran por la distribución a los países de altos ingresos, ocasionando un desabasto "global".
Las comorbilidades que son un factor de riesgo en la letalidad del virus, son el reflejo de la sustitución de hábitos alimentarios saludables . En México, estos factores, junto con un sistema público de salud "desmantelado", "fragmentado" y "desfinanciado" fue un caldo de cultivo para la propagación del COVID.
La gran lección de la pandemia en México, es la "falla del modelo neoliberal". La crisis sanitaria ha sido ocasionada, en gran medida, porque los gobiernos anteriores negaron la importancia de la salud pública y del bien común.
"La enseñanza que dejará será la de reforzar a los Estados con recursos y servicios para la salud pública"; pero para ello es necesario que la SSA, IMSS, ISSSTE, INSABI establezcan políticas públicas contra hegemónicas que estén a la altura de la "nueva normalidad" postpandemia; pero, mientras algunos funcionarios de estas instituciones sigan añorando las políticas neoliberales del pasado y estén presos de su propio "síndrome de hubris" el establecimiento de un verdadero "estado de bienestar" se verá cada día más lejano.
JUAN MANUEL LIRA
EXTITULAR DE LA UNIDAD DE ATENCIÓN MÉDICA DEL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL
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