Podrán transcurrir los días, podrán surgir otros acontecimientos noticiosos, podrá informar la Fiscalía General de la República (FGR) que está detrás de candidatos a gobernador, pero nadie podrá borrar de nuestra memoria la indignación ni el reclamo de justicia por lo que sucedió en la Línea 12 del Metro. Así lo demanda la ciudadanía.
Así lo demandan las 26 familias que aún siguen de luto y las decenas de personas que resultaron heridas. Para ellas nuestra solidaridad y deseos de pronta recuperación.
Sin duda esta tragedia es producto de la negligencia y la corrupción.
Ya lo había advertido la empresa Systra, empresa francesa contratada por el Gobierno de la Ciudad para analizar las fallas de la línea dorada en el año 2014: hay “trenes equivocados, sobre vías equivocadas y sobre un trazo equivocado”.
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En cualquier país del mundo donde exista dignidad y decencia política, los funcionarios públicos involucrados en una tragedia de esta magnitud se separarían del cargo de manera voluntaria.
Contrario a lo que hacen siempre, esta vez las autoridades no pueden culpar de esta desgracia al neoliberalismo ni a los conservadores. Esta línea, en su obra, mantenimiento y operación, es responsabilidad de quienes han gobernado la ciudad en los últimos 23 años.
Por eso, los legisladores del partido en el poder no pueden victimizarse y hablar de “política carroñera”, cuando lo único que se solicita es lo mismo que demandó en 2017, el ahora Presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando dos personas murieron al caer al socavón del Paso Express de Cuernavaca.
La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se comprometió a llegar al fondo de las investigaciones, estamos de acuerdo.
Se requiere de peritajes para conocer las causas del desplome de la estructura. Por ello, esta misma semana solicitamos, a través de un punto de acuerdo, se abra la información sobre la línea dorada, esa que se encriptó desde que se detectaron las fallas.
Solicitamos se hagan deconocimiento público: memorias de cálculo, bitácoras de construcción y de supervisión de construcción, bitácoras de reparaciones de los daños sufridos por el sismo de 2017, bitácoras de mantenimiento preventivo y correctivo.
Adicionalmente, apelamos al sentido de responsabilidad social y científica de la Jefa de Gobierno para convocar a instituciones académicas y colegios de profesionistas nacionales, vinculados con la construcción, para conformar una Comisión Independiente que lleve a cabo un dictamen técnico que determine las causas de la tragedia.
Se requiere de información. Nadie se debe adelantar a los peritajes ni pretender ser los jueces de esta desgracia.
Los ciudadanos exigen que haya responsables sí, pero no culpables a conveniencia.
¡Basta de impunidad!
POR XÓCHITL GÁLVEZ
SENADORA DEL PAN
@XOCHITLGALVEZ
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