Las recientes visitas a México del presidente argentino, Alberto Fernández, y del mandatario boliviano, Luis Arce, provocaron especulaciones sobre la creación de un eje Buenos Aires-La Paz-México, con el presidente Andrés Manuel López Obrador, para ocupar lo que hoy se ve como un vacío de liderazgo en América Latina.
La alianza tiene en parte referencias a viejos vínculos entre Argentina y México, y se vería reforzada con el posible retorno al poder en Brasil de Luiz Inácio Lula da Silva y su Partido del Trabajo.
La nueva coalición latinoamericana buscaría, en parte, desplazar a formulaciones que como el Grupo de Lima son consideradas como de derecha por su actitud respecto a Venezuela.
Una mención aparte sería la Alianza del Pacífico, que mantiene un esfuerzo de acercamiento hacia la emergente región de Asia y en la que están México, Colombia, Perú y Chile.
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El pragmático Fernández visitó Chile hace un par de meses y firmó un acuerdo de colaboración con Sebastián Piñera, el presidente derechista de ese país, al que en su momento el actual gobierno mexicano le hizo el feo.
La igualmente esperada elección de un gobierno afín al expresidente Rafael Correa, en Ecuador, alienta la idea de una nueva "marea rosa" en la región, a la que se unirían Cuba, Nicaragua y Venezuela.
La idea tiene raíces en el llamado "Grupo Puebla", un foro político y académico de personalidades latinoamericanas fundado en julio de 2019, autodefinido como "un espacio de reflexión e intercambio político, que trabaja por el desarrollo integral de los pueblos latinoamericanos".
Según el propio grupo, el 26 de marzo fue "día clave para América Latina: exitoso VIII taller del grupo de Puebla abordó el desafío de la unidad de las fuerzas progresistas de cara a las elecciones de Chile, Perú y Ecuador".
El grupo apoyó las elecciones legislativas de diciembre en Venezuela, que otros en Latinoamérica, Europa y Estados Unidos consideraron parciales por la ausencia de la oposición política.
El subsecretario mexicano de Relaciones Exteriores para América Latina, Maximiliano Reyes, es miembro fundador del grupo —presumiblemente con aquiescencia del canciller Marcelo Ebrard—, junto con los diputados Mario Delgado (del gobiernista Morena) y Beatriz Paredes, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), así como Cuauhtémoc Cardenas y Zoé Robledo.
Otros fundadores son los propios presidentes Arce y Fernández, así como los exmandatarios Lula da Silva (Brasil), Evo Morales (Bolivia), José Mujica (Uruguay), Leonel Fernández (República Dominicana) y Fernando Lugo (Paraguay).
En su encuentro, Fernández y López Obrador apoyaron la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC), revitalizada en 2019 con la nueva elección de México, pero debilitada temporalmente por el abandono de Brasil en 2020.
Lo bueno y lo malo: las iniciativas latinoamericanas de agrupamiento han sido regidas más por ideología que por pragmatismo.
Por JOSÉ CARREÑO FIGUERAS.
JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM
@CARRENOJOSE1
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