SALTO CUÁNTICO

Indígenas quedan fuera de la educación superior

Las prácticas de inclusión de los pueblos indígenas a la educación superior son casi inexistentes

OPINIÓN

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Karina Álvarez / Salto Cuántico / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El estado mexicano sigue sin apostar en la inclusión de los pueblos originarios dentro de la educación superior. Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) aseguran que solo cuatro por ciento de la población indígena entre 25 a 64 años tiene licenciatura, en contraparte con las personas de las zonas urbanas en las que la cifra crece al 20 por ciento.

Las prácticas de inclusión de los pueblos indígenas a la educación superior son casi inexistentes. No hay apertura de universidades públicas en recibir a esta población de jóvenes para realizar sus estudios superiores, lo que, a su vez, amplía la brecha entre estudiantes que viven en ciudades, con los que habitan en las sierras.

De igual manera, aquellos alumnos que logran llegar a universidades no indigenistas se enfrentan a perder su idioma originario, debido a la falta de práctica y a los señalamientos de sus compañeros y de los mismos docentes, quienes, en su mayoría, no son hablantes de ninguna lengua originaria.

Dentro de las pocas opciones que recibe esta población para continuar su formación a nivel superior, están las universidades interculturales, que a nivel nacional suman únicamente 11. Van desde Sinaloa hasta Quintana Roo, pasando por Puebla, Hidalgo, y Estado de México, mismas que en pocos meses crecerán a 13, pues hay dos más en construcción.

La de Puebla se inauguró en 2006 a fin de atender los siete pueblos indígenas que tiene el estado. La universidad se instaló en el municipio de Huehuetla, uno de los más asolados por la miseria. Tiene 15 mil habitantes, de los cuales 90 por ciento vive en pobreza y 75 por ciento en pobreza extrema; son hablantes de totonaco.

En esta universidad estudian más de mil alumnos que se han visto afectados por la pandemia debido a la falta de acceso a internet y a dispositivos para tomar sus clases.

Alibert Sánchez Jiménez, exrector de la Universidad Intercultural poblana, de 2017 a 2020, asegura que, si se abrieran las puertas de las universidades estatales a los pueblos indígenas y se aplicaran verdaderas políticas para la inclusión de los jóvenes, el derecho a la educación podría ejercerse, pero como no ocurre así, las actuales consecuencias de estas malas políticas se traducen en la falta histórica de grupos de profesionistas indígenas hablantes de lenguas.

Y como no hay derechos sin oportunidades, hablamos de una situación que afecta a la mayoría de las poblaciones indígenas, no sólo de México, sino también de América Latina; Perú, Argentina y Colombia, enfrentan una situación similar.

¿Cómo asegurar un derecho cuando no existe la infraestructura? Las 11 universidades interculturales, si bien son una buena opción para los pueblos originarios, no son suficientes para atender a la población indígena de los 32 estados del país en edad de estudiar.

SINCRONÍA: Son inexistentes los jueces y abogados hablantes de alguna lengua indígena, al igual que médicos y docentes.

POR KARINA ÁLVAREZ
K.ALVAREZ.ROSAS@GMAIL.COM
@KAFARK84

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