COLUMNA INVITADA

Los héroes con bata

Se estableció que el grado Banda pudiera entregarse a compañeros de cualquier categoría que desde su propia trinchera hayan colaborado para combatir el COVID

OPINIÓN

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Jorge Marengo / Columna invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El Consejo de Premiación de la Condecoración Miguel Hidalgo es el órgano colegiado conformado por cinco diferentes entes públicos, donde se toman las decisiones a la entrega de “la más alta presea que otorgan los Estados Unidos Mexicanos a sus nacionales para premiar méritos eminentes o distinguidos”.

A solicitud del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y gracias a la buena recepción por parte de las Mesas Directivas del Poder Legislativo, la reinstalación del Consejo se llevó a cabo a finales de mayo de 2020, después de 40 años de ausencia.

Era justo honrar a nuestro personal de salud que combatía la peor pandemia por lo menos del último siglo.

Para agosto de 2020 ya se había instalado el jurado, también difundido la convocatoria y creado la plataforma para recibir las opiniones del personal médico.

En la conmemoración del 16 de septiembre entregábamos las primeras condecoraciones aprobadas, 58 en grado Collar; el 20 de noviembre se hacía lo propio con eventos simultáneos en todo el país para la entrega de 425 condecoraciones en grado Cruz.

El 24 de febrero de 2021 se dio el primer banderazo de salida en Iguala, Guerrero, y el 24 agosto, en el marco de la Conmemoración de los 200 años de los Tratados de Córdoba, comenzó la última fase de entregas con la publicación de seis mil 650 nombres de condecorados pertenecientes a las siete instituciones públicas que cuentan con hospitales COVID-19.

A diferencia de las entregas previas de los grados Collar y Cruz, donde la convocatoria establecía que sólo podía ser acreedor el personal médico y de enfermería, se estableció que el grado Banda pudiera entregarse a compañeras o compañeros de cualquier categoría que desde su propia trinchera haya colaborado intensamente para combatir la pandemia.

Es así como ahora se condecora a personal de limpieza, radiólogos, camilleros, choferes, trabajadores sociales o personal administrativo, por nombrar algunas áreas, donde por cierto, casi 60 por ciento de todo el personal condecorado son mujeres.

Tanto para el Consejo de Premiación de la Condecoración Miguel Hidalgo, como para el jurado, reconocer cada labor bien llevada a cabo es valorarla y aún más, en momentos complejos.

El maestro Zoé Robledo, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y miembro titular del jurado, comentaba en una de las entregas que “era necesario premiar a lo más preciado que tenemos como institución, nuestra gente”.

Cientos son las historias de profesionalismo y valentía que hay tras estas condecoraciones al personal de salud.

Organizar la más grande entrega en la historia de México ha sido una aventura ardua, en la que hemos participado dos Poderes de la Unión, 12 órganos gubernamentales y todas las entidades federativas, con el único objetivo de reconocer y honrar a nuestro personal.

A las mexicanas y mexicanos que ahí estuvieron, a quienes continúan dándolo todo por su gente, la Patria les agradece y les reconoce.

POR JORGE MARENGO CAMACHO

SECRETARIO DEL CONSEJO DE LA CONDECORACIÓN MIGUEL HIDALGO

@JORGEMARENGOCAMACHO

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