Seamos más congruentes en la Reforma Energética, no desde un punto de vista ideológico, si no del ¿cómo? y ¿para qué?, tomaremos la naturaleza los recursos, y en cómo los utilizamos.
Fue usada para intereses políticos de corto plazo, y continúa para ese fin. No ha sido aprovechada para hacer un plan totalitario, y que no sea modificado por la administración que llegue.
La Reforma no es sólo el mercado eléctrico; está el sector de hidrocarburos, y no refiere sólo a la extracción de éstos, sino a los usos que le dan los consumidores finales, principalmente en la transformación en combustibles, y a todo esto, lleva una cadena en la economía.
La única forma de parar esta tendencia sería incrementando la Inversión Extranjera Directa (IED), bajo las regulaciones dentro de la Reforma, y las cuales deberán ser adaptadas en forma continua, recordemos que antes de ésta, todo era contratado por el gobierno, vía empresas estatales.
La Reforma Energética dio impulso a la IED, al haber inversión privada directa a proyectos, originando un incremento en la demanda en otros sectores.
La inversión en energía, frente al total dentro de la IED, hasta antes de la Reforma, era de alrededor de 2 a 3 por ciento, después de su implementación ha pasado ha estar entre el 15 a 17 por ciento, este incremento está ligado a nuevos proyectos o reinversiones en los existentes. La Reforma Energética sirvió para atraer capitales ¿Si o No?
La inversión en el sector energético representa 7.8 por ciento del total de la IED. De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, los países con un mayor número de empresas instaladas en México son: España, con 471; EU, con 372; y Canadá, con 72.
Las nuevas circunstancias de la política energética actual de México, y al no haber una planeación más allá de 2024, y con la incertidumbre económica en el corto plazo en el mundo, ligado a que los dineros de las reinversiones de utilidades de la IED, en los últimos meses están saliendo del país; Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) podrán cubrir a todo, derivado que ellos no producen tecnología, y pagan por tenerla, pero ¿como se hará más allá de 2025?
Ante una revisión del tratado en 2026, cabría una pregunta, entonces ¿para que quiera un T-MEC?; si no hay una coordinación de crecimiento en conjunto, como es el objetivo firmado. Posiblemente veamos en el mediano plazo, la ruptura del tratado trilateral, y pasaría a uno del tipo bilateral.
POR RAMSES PECH
Experto de Caraiva y Asociados
@ECONOMIAOIL
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