LA FORMA ES FONDO

Sembrando adeptos

El presidente López Obrador ha descalificado a periodistas por un reportaje, aun cuando ni siquiera había dado lectura al mismo

OPINIÓN

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Alejandra Cerecedo Constantino / La forma es fondo / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Para no descalificar al periodismo, hay que entender su esencia. El periodista investiga, negocia información de interés e intenta revelar aquellas verdades que muchos desean que permanezcan ocultas.

El presidente López Obrador ha descalificado a la periodista Carmen Aristegui y a la "Revista Proceso" por un reportaje denominado “Sembrando Vida y la fábrica de chocolates”, aun cuando ni siquiera había dado lectura al mismo.

Quien antes respaldaba y defendía la libertad de expresión cuando se descubría la Casa Blanca, ahora emite su posicionamiento argumentando que dichos medios nunca han estado a favor de su movimiento. Ni a favor, ni en contra, ha respondido Aristegui.

Hace unos días platicando con un editor sobre fuentes, notas y la labor de los reporteros, le pregunté cuáles eran los principales puntos del periodismo que abordaba en sus talleres, “hacer enojar a los de comunicación social” me contestó entre broma y broma.

Más tarde, con la Dra. María José Canel analizábamos supuestos sobre cómo relacionarnos con los medios ante diversas crisis, una frase que me quedó muy grabada es que, aunque no nos guste todo lo que comparten, “ellos están haciendo su trabajo”, hay que entender la dinámica, afianzar relaciones, conquistar espacios, ganar el framing.

El periodismo no se hace a favor del pueblo como sugiere el presidente, el periodismo se hace a favor de la verdad.

Coincido con Enrique Krauze en la presentación de su obra de recopilación de ensayos “Crítica al poder presidencial 1982-2021” cuando señala que AMLO no es un tirano, pero está actuando cada vez más como un autócrata.

En ese tenor, se ha impuesto también a Romero Tellaeche como director del CIDE, un candidato que violó el estatuto, que quedó en segundo lugar, que usa una escolta armada y que no cuenta con el apoyo de la comunidad académica. ¿Cómo se puede ratificar a una persona para un centro de investigación, que dice que la ciencia es neoliberal?

La respuesta es que se siguen sembrando miedos, se siguen sembrando dudas y se siguen sembrando adeptos, ahora en las universidades públicas y en los órganos autónomos como Banxico, sitios en donde se requieren personas que cumplan con el perfil, personas críticas e imparciales, no afiliadas a una determinada corriente ideológica.

Esperemos que el caso del CIDE no sea una batalla perdida, el gobierno tiene que entender que no hay ni periodismo, ni autonomía, ni democracia si se siguen sembrando adeptos.

POR ALEJANDRA CERECEDO CONSTANTINO 
Asesora en el Senado de la República