Tranquilos. Para que proceda alguna sanción contras la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, por alterar el Escudo Nacional, es necesario que se presente una denuncia. Y eso, parece, no sucederá.
De lo que no se salvará la hija de Félix Salgado Macedonio es del escarnio por haber develado un mural que asemeja a la Bandera de México con el escudo alterado y que viola todos los artículos de la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacional Mexicano. Muestra un águila de frente y no el águila mexicana, con el perfil izquierdo expuesto. Posada su garra izquierda sobre un nopal florecido que nace en una peña que emerge de un lago, sujeta con la derecha y con el pico, en actitud de devorar, a una serpiente curvada. Por cierto, la serpiente efectivamente esta curvada en forma se S, de Salgado.
Por si fuera poco, esa violación a uno de nuestros símbolos patrios ocurrió en un salón del 27 Batallón de Infantería del Ejército mexicano en Iguala, la cuna de nuestra bandera. Las redes sociales de inmediato estallaron. Recordaron la virulenta reacción de la izquierda cuando se impuso el águila mocha para distinguir al gobierno de Vicente Fox. Ahora, Morena y sus lacayos callan como momias, diría ya saben quién. El artículo quinto de la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacional Mexicano dice que toda reproducción del Escudo Nacional deberá corresponder fielmente al modelo a que se refiere el Artículo 2o. de esta Ley, el cual no podrá variarse o alterarse bajo ninguna circunstancia.
Ante la polémica, Evelyn Salgado se deslindó y pasó la papa caliente al Ejército mexicano. Dijo que ella es muy respetuosa de los símbolos patrios y que se trató de un regalo de artesanos del municipio de Pilcaya al 27 Batallón de Infantería. Es más, informó que ella fue invitada por el general Celestino Ávila, comandante de la Novena Región Militar, a develar la figura de marras.
La Secretaría de Gobernación, encargada de sancionar las violaciones a los Símbolos Patrios, mantiene silencio hasta el momento de escribir este texto. ¿Acaso la Secretaría de la Defensa Nacional enmudecerá también, cuando uno de sus generales participó de esa violación al Escudo Nacional? Es probable que sí, que todo mundo mire hacia el otro lado y dejen que venga el siguiente escándalo.
BON APPÉTIT
La 4T está empeñada en destruir toda expresión académica que considere fifí, neoliberal. Hoy es el CIDE, Centro de Investigación y Docencia Económicas. María Elena Álvarez-Buylla, directora del Conacyt y enemiga de la ciencia neoliberal, de quien depende el CIDE, dio un golpe de estado a uno de los centros académicos mexicanos de mayor prestigio dentro y fuera del país. Por motivos ideológicos, impuso como director a José Antonio Romero Tellaeche con la oposición de la mayoría académicos y estudiantes. La UNAM también está en la mira de AMLO, quien al inicio de su gobierno ordenó buscar la forma de extinguir al ITAM. ¿Quién sigue?