De escándalo, las cosas que ocurren en el Partido Acción Nacional de cara a la elección de candidatos para las gubernaturas que estarán en juego el próximo 6 de junio.
En Chihuahua, Nuevo León y San Luis Potosí, la dirigencia de Marko Cortés enfrenta reclamos, inconformidades y guerras internas que han derivado en serias acusaciones, incluso hasta legales.
El próximo domingo, por ejemplo, los panistas eligen en Chihuahua a su abanderado, entre la exalcaldesa de la capital, Maru Campos, y Gustavo Madero, exsecretario de Gobierno del estado.
Sin embargo, hace algunos días se conocieron serias acusaciones en contra de Maru, con las que buscan sacarla de la contienda. El secretario de Hacienda del exgobernador César Duarte, Jaime Ramón Herrera, aseguró que la panista formaba parte de la nómina secreta del exmandatario priista que recibió dinero en varias ocasiones.
En respuesta, ella acusó a su compañero de partido, el gobernador Javier Corral, de pretender fabricarle delitos para sacarla de la contienda y favorecer a su gallo, Madero.
A través de César Jáuregui, su operador político, Maru señaló que el exfuncionario que la acusa es testigo protegido en el proceso que se le sigue a César Duarte y que fue obligado por Corral a declarar en su contra, con fines meramente políticos. En pocas palabras, la mejor posicionada en las encuestas denunció una persecución por parte de un gobernador de su propio partido, historia que sigue su curso y cuyo desenlace está por conocerse, no sabemos si antes o después de la interna del domingo, allá en Chihuahua. En NL y San Luis Potosí, los problemas no son menores. En el primer caso, el senador Víctor Fuentes denunció “fraude” en la elección de Fernando Larrazábal y espera que los tribunales anulen el proceso.
Algo parecido ocurrió en San Luis Potosí, en donde Xavier Nava impugnó ante la autoridad el “triunfo” de Octavio Pedroza. Ambos casos siguen su curso ante las instancias correspondientes, pero más allá de los fallos o el resultado final, el PAN enfrentará dividido tres plazas de larga tradición para ellos, dejando abierta la posibilidad de que Morena les arrebate la victoria por ambiciones personales, intereses de grupos o el agandalle de un gobernador (Javier Corral) que quiere imponer a su candidato.
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Morena tiene un anuncio al aire en donde dice que cedió ese tiempo para hablar de la vacuna contra el COVID-19, pero en realidad nunca lo hizo.
Según funcionarios del INE, es un fraude a la ley, porque a pesar de que avisó que cedería sus tiempos para la pandemia, eso no ocurrió y está actuando tramposamente. De hecho, otros partidos ya se quejaron oficialmente y esperan una sanción en cualquier momento.
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Y como dice el filósofo… Nomeacuerdo: “Nuestros peores enemigos aquí no son los ignorantes y los sencillos, aunque crueles; nuestros peores enemigos son los inteligentes y los corruptos”.
POR ALFREDO GONZÁLEZ CASTRO
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