Hoy las ciudades son protagonistas en un escenario dominado por posturas nacionalistas, de cuestionamientos al multilateralismo y de ciudadanos cada vez más frustrados por la incapacidad (o falta de voluntad) de los gobiernos nacionales para resolver problemas complejos, como migración y cambio climático. El Pacto Global de Alcaldes, Metrópolis, el Parlamento Global de Alcaldes, el Strong City Network, C40, ICLEI, Ciudades y Gobiernos Locales Unidos son algunas de las más de 300 redes de colaboración que hay, en las que las ciudades movilizan recursos, intercambian conocimiento científico y mejores prácticas para reducir su huella de carbono, impulsar energías renovables, aprovechar la economía digital y atender la violencia, entre otros temas.
Polos de desarrollo e innovación, las ciudades tienen gran poderío económico, demográfico y diplomático. En EU, 10 metrópolis generan más de la tercera parte del PIB. El PIB de Seúl es la mitad del de Corea del Sur; el de Londres, París y Tokio, una tercera parte del de sus economías nacionales. El de NY es mayor que el de Canadá y el de Los Ángeles, similar al de México. Su peso aumentará por la acelerada urbanización, con 75% de la población mundial en ciudades para 2050, comparado con un 55%, hoy.
Muchos retos globales surgen en las ciudades, pero también de ahí provendrán las soluciones. Desde la adopción de modelos de economía circular que transformen la economía de desecho, hasta la contención de la mancha urbana, pasando por el desarrollo de sistemas de transporte y edificación que reduzcan la contaminación, y la mejor integración de universidades para impulsar la innovación y capitalizar una economía del conocimiento. Por la relevancia de las ciudades, Naciones Unidas promueve una nueva agenda urbana, en la que los distintos niveles de gobierno colaboren para pasar de la planeación urbana a un nuevo paradigma que vincule el desarrollo urbano con la sostenibilidad.
Aunque México es eminentemente urbano (78% de la población), las urbes están muy lejos de ser líderes o competitivas. La Ciudad de México destaca como una de las más pobladas, pero está ausente como urbe más innovadoras (Bangalore o Zhenzhen) o con mayores tasas de crecimiento económico, entre 5% y 8% (Dehli, Mumbai y Shanghái). Es buena señal que la nueva agenda urbana sea una prioridad para la Cancillería. Sin embargo, las ciudades brillan por su ausencia en la nueva diplomacia de redes. Aún la CDMX, que participa al menos en 13 de ellas, adolece de una estrategia para aprovecharlas. Para que México pueda ponerse a tono con esta dinámica, las ciudades deben resolver la descoordinación entre órdenes de gobierno y la poca participación ciudadana. Obstáculos que impiden el avance de la nueva agenda urbana y comprometen la prosperidad del país.
[nota_relacionada id=855473]POR ISABEL STUDER
*ASOCIADA SENIOR, THE ATLANTIC COUNCIL
SABEL.STUDER@SOSTENIBILIDADGLOBAL.ORG
@ISASTUDER
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