El retraso en la entrega de cuerpos en el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses y en el Centro de Identificación Humana, debe contar con la coordinación interinstitucional porque las familias al acudir señalan que no hay tal.
Anna Karolina Chimiack, codirectora del Centro de Justicia para la Paz (CEPAD), lamentó que a pesar de la tecnología que se ha presumido por parte de la administración estatal, es una esperanza importante para las familias que tienen cuerpos de larga data; sin embargo, aún hace falta que tenga más avances adecuados.
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El Centro de Identificación Humana requiere de mayor acercamiento con las familias y difusión de sus labores para que se realicen más exhumaciones como la que se realizó en Coyula en mayo de 2022, aunque en esa ocasión se negó la participación de las familias.
"Se ha hecho solamente una exhumación masiva controlada en el 2022 en el Panteón de Coyula, posteriormente no se llevó a cabo ninguna otra exhumación a pesar de que el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses cuenta con recursos y capacidad de realizarlo, sobre todo frente a la falta de coordinación de este trabajo con la Fiscalía".
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Y es que los procesos de Identificación humana se han retrasado principalmente debido a la falta de esta coordinación con la Fiscalía y la falta de difusión en el funcionamiento del propio centro.
"Nos comparten familiares de personas desaparecidas que cuando acuden al Centro de Identificación Humana parece que es un espacio vacío donde no se llevan a cabo estas acciones".
En el 2022 se negó la participación de las familias en la exhumación, lo que no contribuye en generar la confianza ni tampoco para tomar en cuenta la experiencia que de por sí han ido sumando los Colectivos.