El uso no regulado ni supervisado de químicos abortivos ha crecido en forma considerable. Sin embargo, esta vía presenta varios riesgos que merecen una atención urgente, pues su uso fuera de una vigilancia y seguimiento médico pone en riesgo la salud de muchas mujeres.
En entrevista con Blanca Becerril para el programa Reporte H de Heraldo Televisión, que se transmite mediante la señal de El Heraldo Media Group, Joaquín Ruíz Sánchez, especialista en Ginecología y Obstetricia y Diana Gamboa Aguirre, maestra en derecho constitucional y profesora e investigadora, destacaron los riesgos para las mujeres por la ingesta de misoprostol y mifepristona, debido a la falsa información y sin base médica, además de la falta de control en su venta.
Alertan sobre uso de misoprostol y mifepristona: "Pone en riesgo la vida de mujeres. Son el 'enemigo silencioso'”
Las píldoras abortivas, que originalmente no fueron diseñadas para ello, también conocidas como métodos de aborto médico, generalmente se administran en dos etapas: la mifepristona, que bloquea la hormona progesterona necesaria para mantener el embarazo, seguida de misoprostol, que induce contracciones uterinas para expulsar el tejido del embarazo.
Aunque estos químicos pueden ser efectivas en apariencia, pueden presentar una serie de riesgos para la salud, en el corto, mediano y largo plazo, al grado de generar infertilidad permanente en ciertas circunstancias.
El verdadero peligro detrás de estos medicamentos es que están de libre venta ahí en las farmacias y mucha información de, entre comillas, fácil acceso en Internet, que hace que las mujeres que se ven vulnerables encuentran una aparente salida, encuentra estos medicamentos de manera fácil y sin restricciones en las farmacias se lo auto administran y entonces estamos cayendo en una espiral muy compleja en el tema de salud", dijo el médico especialista Joaquín Ruíz Sánchez.
Comentó además que la falta de control en la distribución de estos fármacos y la ausencia de seguimiento médico adecuado ponen en riesgo la salud de muchas mujeres. “Las mujeres que usan estos medicamentos sin supervisión médica pueden enfrentar graves complicaciones que a menudo se descubren demasiado tarde", añadió.
Vacíos legales en su uso
Desde un punto de vista legal, la situación es igualmente preocupante, pues la abogada Diana Gamboa destacó que el marco jurídico actual para la regulación de estos medicamentos no se está aplicando eficazmente, permitiendo una libre distribución que desatiende los controles sanitarios necesarios.
"La realidad es que hay una libre distribución de estos fármacos en perjuicio de las mujeres que al final son las que pagan es son las mujeres que caen en este engaño de que no pasa nada", dijo Diana Gamboa.
Por lo anterior, Diana Gamboa dijo que es necesario que exista una mayor regulación por parte de las autoridades sanitarias, las cuales deben tomar medidas urgentes para fortalecer tanto su venta como la administración de estos medicamentos, además sugirió crear una alerta sanitaria para alertar a la población sobre el uso de estos fármacos.
Dijo además que se tiene registrado que cerca de mil 400 mujeres han padecido consecuencias adversas derivado del consumo de estos fármacos , son las llamadas víctimas del misoprostol, y no hay un seguimiento sobre sus consecuencias o las reacciones posteriores a su uso: "entonces nos hace falta limitar el libre acceso".
Nueva clandestinidad del aborto
El doctor Joaquín Ruíz explicó además que, debido a la falta de información, las mujeres ponen en riesgo su vida ya que se tiene la idea errónea de que el consumo del misoprostol y mifepristona es seguro, pero alertó que muchas de ellas suelen presentar síntomas de riesgo ante la falta de supervisión médica por parte de algunos especialistas.
"El hecho de recibir estos medicamentos tan fáciles en una farmacia hace que la mujer se ponga muy vulnerable. Yo diría es la nueva clandestinidad del aborto que tratamos tantos años de quitar lo clandestino al aborto, y de hacer que las mujeres no fueran víctimas de esta clandestinidad, para que ahora a través de estos químicos se genere una situación igualmente clandestina, en detrimento de la salud de las mujeres que lo ingieren", dijo Joaquín Ruíz Sánchez.
Urge un control sanitario efectivo
La abogada Diana Gamboa expuso que la falta de control sanitario en el uso de medicamentos abortivos, destacando una serie de preocupaciones tanto a nivel federal como estatal. Explicó que la ausencia de control se manifiesta en la forma en que se han manejado estos fármacos por parte de las autoridades federales y estatales.
"Este tema se ve manchado por un activismo, por dilemas políticos, por dilemas económicos, por un negocio que lucra con el exterminio de los más vulnerables y que lucra con la salud de las mujeres", comentó Diana Gamboa.
Gamboa también criticó la falta de información accesible sobre la venta y el uso de estos medicamentos, señalando que muchas mujeres buscan estos productos en línea y recurren a clínicas sin el control adecuado. También hizo un llamado a las mujeres para que no se sientan solas y busquen atención médica adecuada.
Subrayó la importancia de que el sistema de salud no solo se enfoque en el aborto, sino también en la atención integral a la maternidad y en el fortalecimiento del cuidado reproductivo.
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