Siete miembros de una familia, incluyendo tres menores de edad, fallecieron en un ejido pesquero de San Fernando, Tamaulipas, debido a la supuesta inhalación de dióxido de carbono proveniente de una planta de luz, aunque las autoridades siguen investigado en caso para conocer cuáles fueron las causas.
Los cuerpos fueron encontrados a las 23:00 horas del domingo en el Barrancón del Tío Blas, ubicado en la costa del Golfo de México, al norte de San Fernando. Dada la lejanía del lugar, las autoridades confirmaron el caso hasta el lunes.
Crédito: Pexls
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Las víctimas fueron identificadas como Tereso “H”, de 45 años, su esposa Aracely “H”, de 35, y la pareja formada por Leonardo “R”, de 37, y Mayra Liseth “R”, de 35. Los hijos de esta última pareja, de 14, 16 y 17 años, también murieron.
Fueron unos niños de la familia quienes encontraron los cuerpos mientras los buscaban, ya que no habían tenido noticias de ellos. La policía confirmó que la intoxicación fue causada por el dióxido de carbono emitido por la planta eléctrica que utilizaban debido a que las tormentas del fin de semana dejaron sin luz al poblado.
El problema se propició porque no abrieron ninguna ventana o puerta para ventilación. Los familiares mencionaron que las víctimas habían asistido a una fiesta de quince años la noche anterior y regresaron a casa al amanecer se quedaron dormidos, se piensa que el cansancio y el posible consumo de alcohol contribuyeron a que no se dieran cuenta de ello.