El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres informó que se entregaron 44 viviendas a familias otomíes que vivieron por años en un campamento en la colonia Juárez.
En conferencia de prensa en Palacio del Ayuntamiento, el mandatario capitalino dijo que se hizo justicia a las familias que por años habitaron un predio en la calle de Roma 18. Destacó que la desocupación del predio y la entrega de las viviendas se realizó mediante un proceso de diálogo entre las autoridades capitalinas y las familias otomíes.
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Martí Batres dijo que las familias aceptaron un departamento del Instituto de Vivienda de la Ciudad de México, sin embargo, el mandatario capitalino no reveló la alcaldía ni el desarrollo donde fueron reubicados.
“Había un grupo de familias 44 familias ubicadas en la calle, en un campamento a un costado del predio localizado en Roma 18, colonia Juárez, este campamento se ubicó ahí desde que hace años, se dio un desalojo porque las familias vivían en ese inmueble que se encuentra en la calle de Roma y fueron desalojados, y entonces se instalaron ahí en la calle, estuvieron ahí durante varios años, y ahora que se están concluyendo la construcción de viviendas para comunidades indígenas se les dio un espacio a todas esas familias en una de las unidades habitacionales que se están construyendo para tal fin, para las comunidades indígenas”, explicó.
Es un acto de justicia, dice Martí Batres
El mandatario capitalino consideró que esta acción es un acto de justicia social que permite entregar vivienda a comunidades indígenas y destrabar un conflicto en la colonia Juárez.
“Esto nos permite por un lado realizar un acto de justicia, de justicia social, al otorgarles vivienda a estas familias, pero por otra parte también es importante porque es una respuesta a los vecinos de la colonia Juárez, que venían pidiendo la atención a esta problemática. La atención a las familias que se encontraban ahí, y por supuesto pues la acción correspondiente para liberar esta calle (...) se cumple un objetivo de justicia para las comunidades indígenas para 44 familias de la comunidad otomí que estaba viviendo ahí en la calle y ahora tienen una vivienda digna, y por otra parte se responde también a la petición de los vecinos de la colonia Juárez para desocupar esta calle está desocupación se hace no en una lógica de uso de la fuerza sino de justicia, lo cual es virtuoso y es relevante”, indicó.