La farmacéutica AstraZeneca ha estado de nueva cuenta en la conversación luego de que admitió por primera vez en documentos judiciales que su vacuna contra la Covid-19 podría causar trombosis en situaciones excepcionales. Pero, ¿sabías que no ha sido la única empresa señalada por esto? Te contamos.
Sólo que antes valdría la pena partir de que según información compartida por el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), la trombosis hace referencia a la formación de un coágulo en una vaso sanguíneo que básicamente impide que la sangre fluya en el organismo como lo hace de forma habitual y puede llegar a ser tan grave al nivel de ocasionar la muerte.
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¿Cuáles son las causas de la trombosis?
De acuerdo con los datos compartidos por el Insabi, la trombosis suele ser una de las principales causas de muerte en todo el mundo y es subyacente de otras enfermedades. No obstante, la formación de coágulo puede tener múltiples causas entre las que destacan las que te mencionamos a continuación:
- inactividad física
- intervenciones quirúrgicas recientes
- tener 65 años o más
- tomar hormonas
- pasar mucho tiempo sentado o acostado
- presentar problemas en el corazón
- tener venas con varices
Esta es la otra vacuna contra Covid-19 que ha sido relacionada con la trombosis
Resulta que además del de AstraZeneca, el otro fármaco contra la Covid-19 que ha sido relacionado con casos de trombosis desde el inicio de la pandemia, es la vacuna de Johnson y Johnson. De hecho, en el año 2021, las agencias federales de salud de Estados Unidos pidieron su suspensión luego de que se reportaron seis casos de trombosis tras la aplicación de sus dosis. ¿Qué pasó después?
Luego de su suspensión, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sacaron un comunicado en el que informaron que tras realizar una "revisión de seguridad exhaustiva", las instancias correspondientes —entre las que destacaron el Comité Asesor sobre Prácticas de Vacunación (ACIP) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA)— determinaron reanudar el uso de la vacuna en cuestión.
Pese a lo anterior, en 2022 CDC advirtió que este fármaco debía usarse de forma limitada, especialmente al aplicarse en personas consideradas vulnerables tales adultos mayores y quienes tienen algún padecimiento crónico. Sin embargo, más tarde, en 2023, dejó de estar disponible en Estados Unidos.