El director de la escuela primaria Benito Juárez del municipio de Santiago de Anaya, Rufino “N”, promovió un juicio de amparo ante el Poder Judicial de la Federación (PJF) para evitar ser aprehendido por su presunta responsabilidad en el homicidio culposo del menor Adriel de 11 años de edad que falleció por el bullying que sufrió de sus compañeros en el plantel educativo.
El educador solicitó el amparo ante el Juzgado Tercero de Distrito en Hidalgo para evitar ser capturado y pagar una garantía económica de ocho mil 500 pesos, con lo cual no podrá ser aprehendido por la policía investigadora de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH).
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La docente del grupo de Adriel, Flor “N”, también solicitó un amparo ante el PJF para evitar ser detenida, luego de que el pasado 18 de marzo se giró una orden de aprehensión en contra de ambos educadores, debido a su presunta responsabilidad en el delito de homicidio culposo.
Adriel fue aventado por las escaleras
El pasado 8 de marzo, Adriel de 11 años de edad falleció tras ser aventado por las escalares de la escuela por dos de sus compañeros, y permanecer internado en el Hospital General de Actopan durante casi una semana, razón por la cual los familiares del infante exigieron justicia por los hechos.
Sin embargo, la Ley de Justicia para Adolescentes del estado exime de cualquier responsabilidad penal a los dos menores de edad al ser menores de 12 años de edad, razón por la cual la PGJEH acusó al director del plantel educativo y a la docente por el delito de homicidio culposo.
Al respecto, el titular de la Secretaría de Educación Pública estatal (SEPH), Natividad Castrejón Valdez, dijo que hasta el momento no se han separado a los dos alumnos agresores hasta que las indagatorias así lo determinen, mientras que ambos educadores fueron retirados de sus funciones hasta que concluyan las investigaciones penales.