Con un mejor aspecto físico y emocional, Annie, la elefanta rescatada en Lagos de Moreno, inició su viaje al Zoológico de San Juan de Aragón, al nororiente de la Ciudad de México (CDMX), ello para garantizar un mejor hábitat y desarrollo en lo que le queda de vida.
Para materializar este objetivo, inspectores de la Oficina de Representación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Jalisco, acompañados por personal especializado del Zoológico de San Juan de Aragón, se encargaron del manejo, contención y traslado de Annie.
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Inicia el viaje de Annie rumbo a la CDMX
El procedimiento para poder realizar el traslado inició el 13 de marzo con la colocación de un contenedor de acero en color verde de 2.44 metros de ancho, por 3.60 metros de alto, por 6.07 metros de largo, a un costado de la jaula, para que Annie pudiera explorar el espacio y se familiarizara con él.
La intención de esto es reducir al máximo los niveles de estrés de la elefanta, considerando necesario que ésta ingresara al contenedor por su propio pie, respetando la prerrogativa de trato digno y respetuoso.
Como ya se consiguió esto, Annie podrá ser trasladada vía terrestre de Jalisco a la CDMX; al respecto, se destaca que el ejemplar de elefante africano será escoltado por, además de zootecnistas de la Profepa, elementos de la Guardia Nacional.
La triste historia de Annie
Cabe recordar que Annie vivía en un "recinto" improvisado que no garantizaba su bienestar en Lagos de Moreno, Jalisco, lugar donde manifestó diversos padecimientos por el abandono que sufría por parte de los supuestos responsables de su cuidado.
La historia de Annie en México inició con su presencia en un circo de fama nacional; no obstante, tras la aprobación de una iniciativa del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en 2015 donde se prohíbe la participación de animales en espectáculos, la responsabilidad de la elefanta fue delegada a un recinto que no cumplía con las especificaciones adecuadas.
Años después, la Profepa inspeccionó el recinto y descubrió a una Annie venida a menos, pues se le encontró amarrada de una pata para evitar su movilidad; asimismo, tenía signos de estrés y desnutrición, motivo por el cual la autoridad intervino y se buscó el espacio adecuado para ella.
Fue así como se tomó la decisión de llevar a Annie al Zoológico del Bosque de San Juan de Aragón en la capital nacional, donde especialistas en paquidermos le darán seguimiento y atención a las necesidades específicas de la elefanta, tomando en cuenta su dignidad y bienestar. Por lo que la Profepa estará al pendiente del proceso de entrega-recepción de Jalisco a la Ciudad de México y se le dará seguimiento a la adaptación de la paquidérmica en las instalaciones del Zoológico.