"ES UN DERECHO HUMANO"

Iglesia Católica llama a las autoridades a emprender acciones que permitan el acceso al agua potable

Señalaron que las políticas públicas deben garantizar el desarrollo y mantenimiento de la infraestructura en las zonas de escasez

NACIONAL

·
Sostuvieron que este problema no es único del gobierno.Créditos: Especial

La iglesia católica hizo un llamado a las autoridades de gobierno para que de manera inmediata emprendan acciones que permitan el acceso constante al agua potable y de calidad a los habitantes que radican en el Valle de México, en especial a las comunidades más pobres. 

A través del Diario Desde la Fe, detallaron la importancia de atender este tema, pues con las políticas públicas se debe garantizar el desarrollo y mantenimiento de infraestructura en zonas de escasez, Además, apuntaron la importancia de invertir en tecnología que permita el correcto tratamiento de aguas residuales y captación de agua.

Piden que se garantice el desarrollo y mantenimiento de infraestructura. Foto: Ilustrativa

Sigue leyendo: 

Morena busca sancionar hasta con 9 años de cárcel el huachicoleo de agua potable

¿El agua de mar puede ser potable? Israel prueba desalinizadoras para utilizar el líquido ante sequías

“El acceso al agua potable y segura es un derecho humano básico, fundamental y universal, porque determina la sobrevivencia de las personas, y, por lo tanto, es condición para el ejercicio de los demás derechos humanos”, resaltaron. 

Los religiosos detallaron que el acceso al agua es un derecho humano, sin embargo, enfatizaron en que desafortunadamente no todos gozan de él, “de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto en los Hogares, la población que recibe el servicio diario de agua potable y saneamiento mejorado en la Ciudad de México es de 70 por ciento, mientras que para el Estado de México es del 48 por ciento. Este porcentaje se reduce a medida que nos acercamos a las periferias”, manifestaron. 

Aunado a ello, sostuvieron que este problema no es único del gobierno, pues la responsabilidad recae en toda la sociedad, sin excepciones, a cuidar y hacer buen uso del vital líquido. 

“El agua es esencial para la vida, el desarrollo y la dignidad de todas las personas y comunidades. Es un derecho humano y, en su distribución y cuidado, gobiernos y sociedad civil deben tener puntos de encuentro para construir un futuro sostenible y que garantice con justicia el derecho al agua”, concluyeron.