En una visita a Mazatlán, Sinaloa, el gobernador Rubén Rocha Moya fue recibido con abucheos y manifestaciones de rechazo por parte de estudiantes de la Universidad Autónoma de Sinaloa. Los inconformes, que se hicieron notar con cánticos como "Fuera Rocha" y "Rocha traidor", obstaculizaron el paso de los mandatarios en las inmediaciones del hotel donde pernoctarían, generando un ambiente tenso en la llegada de Rocha y el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El incidente ocurrió tras la conferencia de prensa en la que ambos líderes inauguraron el acueducto de Picacho en el municipio de Concordia. En este evento, el gobernador Rocha expresó el beneplácito de los sinaloenses por la presencia del presidente, destacando el afecto de la población hacia él.
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Sin embargo, el descontento de una parte de la población se hizo evidente en las calles de Mazatlán, reflejando tensiones políticas y desacuerdos con la gestión del gobernador. Este episodio, aunque breve, puso de manifiesto la polarización y el descontento que persisten en algunos sectores de la sociedad sinaloense.
Además de las manifestaciones, se ha generado controversia en torno a las declaraciones de Rubén Rocha Moya durante la inauguración del acueducto. El gobernador sugirió la posibilidad de "hacer una curvita al asunto" para extender el mandato del presidente López Obrador, planteando la idea de la reelección.
Estas declaraciones llegan a una semana del inicio de las campañas presidenciales, y aunque la idea de la reelección ha sido debatida en el ámbito político, la propuesta de Rocha agrega un elemento adicional a la discusión sobre el futuro político del país. La visita a Sinaloa se convierte así en un escenario de tensiones, expresiones de descontento y propuestas que podrían impactar el panorama político en el contexto electoral que se avecina.