Luis Javier, un individuo señalado como una figura central en el tráfico de fentanilo hacia los Estados Unidos y objeto de búsqueda por parte de la DEA, fue encontrado asesinado en el exterior de un hospital en Culiacán, Sinaloa.
Su cuerpo fue hallado abandonado en las proximidades de la Unidad de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social número 36, situada en la colonia Infonavit al norte de Culiacán.
La información oficial disponible en las páginas del gobierno estadounidense confirma que la DEA (Drug Enforcement Administration) ofrecía una recompensa de un millón de dólares por la captura de esta persona, a quien consideraban un destacado traficante de fentanilo.
“Luis Javier es un traficante de fentanilo para el cártel de Sinaloa, involucrado en el movimiento de grandes cantidades de fentanilo desde México, con dirección a Estados Unidos, en forma de pastillas y polvo. El Departamento de Estado de Estados Unidos ofrece una recompensa de hasta un millón de dólares por información que lleve a su arresto y/o sentencia”, se lee en la página oficial del gobierno de los Estados Unidos.