Este martes 19 de septiembre, el fiscal general de Morelos, Uriel "N", fue vinculado a proceso por el delito de tortura, así como presuntamente ejecutar un doble homicidio y un feminicidio en abril de este año.
Desde el 5 de septiembre, el exfuncionario habría ingresado al penal de El Altiplano, en Almoloya de Juárez, quien venía desde el Reclusorio Sur, en la capital del país, esto bajo un dispositivo de seguridad que implementó la Fiscalía General de Justicia (FGJ-CDMX), en coordinación con elementos de la Ciudad de México y el Ejército Mexicano.
Este caso se refiere a la presunta tortura en agravio de Luis Alberto Ibarra Martínez, "El Diablo", señalado por la Fiscalía General de Morelos por al menos tres asesinatos en Huitzilac, en abril pasado.
Hay pruebas suficientes
Durante la audiencia inicial, el impartidor de justicia consideró que la Fiscalía General de la República (FGR) aportó los datos de prueba necesarios para que el fiscal enfrente proceso penal por este delito.
Incluso se encontraron cinco de los 11 reactivos que establece el Protocolo de Estambul, que especifica las formas para configurar el delito de tortura.
Fue una audiencia con varios recesos porque el fiscal morelense, que siguió el proceso a control remoto, interrumpió el desarrollo al argumentar que no escuchaba con claridad.
Además, el juzgador le impuso al funcionario la medida cautelar de prisión preventiva, por lo que permanecerá en la cárcel de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.
El juzgador dio tres meses para el cierre de la investigación complementaria. La investigación por este caso fue realizada por la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos de la FGR.
Con información de Guadalupe Flores.
DRV