María Teresa Rodríguez, alias “La Tía”, fue una de las mujeres encargadas de “proteger” la plaza en Cancún, Quintana Roo, con su grupo delictivo del Cártel de Cancún, fundado por Leticia Rodríguez “Doña Lety”. La sicaria ayudó a fundar el grupo de sicarias que años más tarde sería identificado como una escisión del Cártel de Los Zetas.
Ante la creciente pugna entre grupos del crimen organizado en el estado, “La Tía” comenzó a reclutar además de hombres, a mujeres incluso menores de edad, a quienes convirtió de dóciles personas a temibles sicarias, según Diario Imagen de Quintana Roo.
El auge de “La Tía” en Quintana Roo
María Teresa Rodríguez fue ganando reconocimiento y escalando en la organización del Cártel de Cancún a la par de la ex policía federal Leticia Rodríguez “Doña Lety”, quien se apropió de la zona hotelera y controló el narcomenudeo en la zona, juntas lograron crear a “Las Cachorras”, un grupo de sicarias que aspiraban a subir de puesto para llegar al equipo de élite conocido como “Las Panteras”.
Sin embargo, años después la pareja se unió a grupos antagónicos del narcotráfico, Doña Lety se fue a las filas de Ismael “El Mayo” Zambada y “El Chapo” Guzmán, mientras que María Teresa Rodríguez, alias “La Tía” hizo lo propio con Los Zetas fundado por Heriberto Lazcano alias “El Lazca”.
“La Tía” también identificada como “La Gorda”, terminó con el control de la plaza en Chetumal, Bacalar, Puerto Morelos y Cozumel, aunque comenzó a disputar las zonas de Playa del Carmen y Cozumel, al enfrentar a su antigua aliada que se unió con el Cártel de Sinaloa. Para mantener el control de sus plazas y seguir en la pelea, “La Tía” siguió reclutando gente.
La caída de “La Tía”
La jefa sicaria encontró en las pandillas de delincuentes juveniles locales a sus próximos aliados, uno de aquellos grupos fue identificado como Los Talibanes que tras la detención de uno de sus líderes llamado Juan Daniel Velázquez Caballero, alias “El Talibancillo”, el control quedó en manos de “La Tía”, según Quadratín.
Tras ese cambio, el grupo delictivo de Leticia Rodríguez comenzó a ganar fuerza, por lo que la organización criminal liderada por “La Tía” no tuvo más remedio que platicar con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) de Nemesio Oseguera Cervantes en una especie de mediadora.
Pero el “reinado” de “La Tía” en Quintana Roo terminó cuando “Doña Lety” se apoderó del control de la plaza con ayuda de la pandilla de “Los Pelones” y dio un duro golpe a María Teresa Rodríguez tras propiciar su arresto el 9 de abril de 2015 por parte de las fuerzas federales. Pero trascendió que la sicaria continuó operando desde prisión.
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