Los puntos del alcoholímetro en múltiples ciudades de la República sirven para detectar a conductores que manejan bajo los influjos del alcohol, lo que podría resultar en graves accidentes que pueden llegar a cobrarse no solo la vida de quien está tras el volante, también de sus tripulantes, o de transeúntes, otros choferes y un largo etcétera.
Las consecuencias son pagar una multa grave, que muevan tu automóvil al corralón, e incluso que pises el "torito" y enfrentes a un juez cívico, razón por la que muchos utilizan, por ejemplo, aplicaciones de celular para esquivarlos, o simplemente se los pasan a grandes velocidades.
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Evita alcoholímetro y termina chocando
Tal como sucedió en San Andrés Cholula, donde el conductor de un automóvil rojo se vio arrinconado por las patrullas que implementaban el operativo en contra de los conductores ebrios, por lo que decidió acelerar, se saltó el camellón y además, terminó estampado en contra de una camioneta que transitaba sin deberla ni temerla.
La huida fue captada por las cámaras de los transeúntes presentes en la zona, incluso se puede ver como un policía sale corriendo de la calle para evitar que lo atropellen. Después del choque, se puede ver que sigue avanzando para escapar de dos incidentes ahora, y luego se corta la grabación.
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El conductor tiene 18 años
Medios locales informaron que el joven de 18 años fue finalmente detenido por la Policía de Tránsito Municipal de San Andrés Cholula en la entrada al pueblo Mágico. Los hechos ocurrieron en la calle 14 oriente con avenida 15 de mayo. Supuestamente habría presentado un grado elevado de alcohol.
Cuando le pidieron que bajara del carro para las pruebas correspondientes, huyó inmediatamente y entonces pasó todo lo que puede verse en las grabaciones. Indicaron, además, que fue gracias a la activación de las bolsas de aire del automóvil que el sujeto no pudo ir muy lejos.
Por su parte, las autoridades tuvieron que aprehenderlo, lo presentaron ante el juez cívico correspondiente y ahora deberá enfrentar el procedimiento por manejar con un tercer grado de intoxicación etílica, deberá pagar por los daños ocasionados a un tercero, así como las multas correspondientes para sacar del corralón el automóvil.