Un día después de que centenares de locales se redujeron a cenizas, la cifra se actualizó a 525 comercios afectados del mercado central de Acapulco. Este medio día llegaron peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) que tomaron muestras para las pruebas con las que la dependencia busca demostrar que originó el fuego.
La FGE emitió el lunes solo un comunicado en el que informó que inició una investigación por daños a la propiedad, una fuente explicó que esta carpeta se abrió de oficio y durante el transcurso de las investigaciones se podría modificar el delito perseguido.
Cerca de las 14 horas de ayer, hasta la zona del desastre arribó la Fiscal General del Estado, Sandra Luz Valdovinos Salmerón, acompañada del Fiscal Regional Rafael Saldaña, una comitiva de policías de investigación, además de efectivos, y binomios de la Unidad Canina, pero los peritajes iniciaron hasta este martes. El equipo de peritos realizó maniobras al interior de los escombros de la principal central de abastos de la ciudad, ubicada en el Centro del puerto.
Créditos: Especial
La zona permanece custodiada
Las indagatorias iniciaron en la nave de sombrillas donde se consumieron 104 locales, continuó hacia los alrededores, y en la nave mayor donde comerciantes reportaron más afectaciones. Personal de la Secretaría de Gestión Integral y de Protección Civil Estatal realizó un dictamen de seguridad estructural que dio el visto bueno para iniciar las indagatorias.
La zona permanece custodiada por patrullas de la Policía municipal, estatal, Guardia Nacional, Ejército y la Secretaría de la Marina (Semar).
Créditos: Especial
A unos metros de la valla, se empezó con el censo de los locatarios en las instalaciones de la Dirección de Mercados y Centrales de abasto del municipio. Con el padrón actualizado, la cifra preliminar de 570 bajó a 525 negocios consumidos a cenizas. Para los locatarios “no hay una ayuda como tal, porque nos están cobrando de 600 a 800 pesos” para reponerles la licencia de funcionamiento que se consumió por las llamas.
Los concesionarios de puestos intentaron recuperar lo que pudieron, pero los fierros que quedaban de sus comercios los retiró una retroexcavadora y un camión de volteo. No hay víctimas mortales ni lesionados humanos, pero sí decenas de aves que se vendían en la zona, perros y gatos calcinados que no lograron salir a tiempo.
Con información de Alfonso Juárez
srgc