El pasado martes 25 de abril, se aprobó en lo general la reforma que elimina el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), lo que ha generado una serie de preguntas sobre el futuro de la salud en México. Esta misma fue ratificada el sábado 29 en el Senado.
La eliminación del Insabi y su reemplazo por el IMSS-Bienestar ha sido criticada por la oposición, que afirma que esta reforma no aborda las necesidades reales del sistema de salud de México. Sin embargo, los aliados de Morena en la Cámara de Diputados defienden la reforma como una medida necesaria para mejorar el acceso a los servicios de salud y reducir la corrupción en el sistema.
La transición del Insabi al IMSS-Bienestar se llevará a cabo de manera gradual y se espera que no afecte significativamente a los pacientes que actualmente están afiliados al instituto.
¿Qué pasará con las personas afiliadas?
Pese a la gran incertidumbre que se ha generado en los últimos días. ahora se ha asegurado que las personas que actualmente reciben servicios de salud a través del Insabi tendrán acceso a los mismos servicios mediante el IMSS-Bienestar, y que no se les cobrará ninguna tarifa por estos servicios.
Además, se espera que los recursos del Insabi se transfieran al IMSS-Bienestar durante la transición, lo que debería ayudar a asegurar la continuidad de los servicios de salud.
El éxito de la eliminación del Insabi y la transición al IMSS-Bienestar dependerá de la eficacia con la que se implemente esta reforma y de la voluntad del gobierno de invertir en el sistema de salud para mejorar el acceso y la calidad de los servicios.
Esta nueva ley de salud trae consigo importantes cambios para el sistema de salud público del país, entre los destacados es la transferencia de los trabajadores y trabajadoras del Insabi al IMSS-Bienestar o a la Secretaría de Salud, asegurando que sus derechos laborales sean respetados en todo momento de acuerdo a la ley y las normas aplicables.
Además, otra medida importante es la prohibición del cobro de cuotas por servicios de salud y medicamentos en las instituciones que atienden a personas sin afiliación, lo cual garantiza un acceso más equitativo y justo a la atención médica para toda la población.
¿Qué pasará con sus trabajadores?
Para llevar a cabo esta transferencia de recursos humanos, presupuestarios, financieros y materiales, así como de los inmuebles, derechos y obligaciones del Insabi al IMSS-Bienestar, la Secretaría de Salud contará con un plazo máximo de 180 días naturales contados a partir de la entrada en vigor del decreto, y se espera que durante este período se establezcan los términos, plazos y condiciones para su correcta implementación.
Por otro lado, recientemente el Insabi informó que se dieron por concluidas todas las convocatorias del personal de salud establecidas por el instituto y que en las próximas semanas se dará a conocer una nueva plataforma para la participación del personal de salud
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Desaparición del Insabi indica fracaso de política para centralizar servicios de salud