El 11 de mayo de 2022, Adriana dio un discurso dirigido al ministro presidente Arturo Zaldívar en la cárcel femenil de Santa Martha Acatitla.
La mujer recordó en entrevista con El Heraldo de México, que ese día, ella y otras internas, entre estas la ex secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, tomaron la palabra para pedirle al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que les ayudara a recuperar su libertad.
“Preparé un pequeño discurso señalándole (a Zaldívar) que le dábamos la bienvenida a él y a su equipo de trabajo y que, siguiendo su trayectoria por los compromisos y resultados que daba en la Suprema Corte, que era un honor para nosotras tenerlo.
“Le hago la propuesta que nos diera algunas alternativas viables y alcanzables para poder obtener nuestra libertad, sobre todo para delitos de alto impacto porque es muy difícil que se otorgue un beneficio para ese tipo de delitos”, destacó Adriana.
Cuando él se retiró, dijo, las invadió la esperanza de salir de prisión, algo que muchas ya habían perdido.
“La visita del ministro cimbró Santa Martha, fue tan emotivo ese evento”, señaló la mujer de 45 años de edad, quien hoy está libre luego de esa visita de Zaldívar.
El presidente del máximo tribunal concluyó su gestión con un cambio para nueve mujeres -entre estas Adriana-, que abandonaron ese centro penitenciario porque defensores públicos federales revisaron su caso y lo litigaron en tribunales.
Adriana pasó 15 años en prisión porque, luego de meses de violencia física y psicológica que vivió con su esposo, ella se defendió con un cuchillo y este perdió la vida.
Fue sentenciada a 35 años de cárcel por homicidio calificado en razón de parentesco y después la pena se le redujo a 27 años y 6 meses por un amparo.
“Mis sueños se derrumbaron, mi agresor venía de una familia disfuncional, lleno de adicciones, complejos, miseria humana, fuerza física, manipulador, controlador, conquistador, chantajista y hasta romántico”, dijo.
El Instituto Federal de Defensoría Pública logró que se le concediera el beneficio de preliberación y ahora Adriana debe firmar periódicamente ante la autoridad correspondiente.
Adriana estudió la Licenciatura en Finanzas y un posgrado en Administración de Empresas, en Santa Martha cursó la carrera de Derecho y en febrero realizará su examen profesional, ya en libertad.
“Es importante alzar la voz y que nos escuchen porque no somos el estiércol de la sociedad, somos mujeres que necesitamos mucho apoyo, que tenemos sentimientos”, enfatizó.
MAAZ
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