El senador por Zacatecas y afín a la corriente radical de Morena, José Narro Céspedes, sostuvo que, debido a dificultades para lograr un consenso entre los contendientes del partido a la presidencia del Senado, todo se decidirá en la elección del 31 de agosto, situación totalmente natural en una democracia partidista.
Narro aseveró que busca encabezar la Mesa Directiva de la Cámara alta porque representa el diálogo, la pluralidad entre bancadas y porque garantiza la continuidad en las iniciativas del Ejecutivo federal y del Grupo Parlamentario de Morena, además de que tiene 36 apoyos de sus compañeros.
“Representamos la democracia, el diálogo, el ejercicio político y no la politiquería. Soy parte de un movimiento que llegó al poder gracias a la confianza de millones de personas”, aseveró.
El legislador, quien desde 1987 ha militado en el proyecto de izquierdas, primero en el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y después al lado de Andrés Manuel López Obrador, con Morena, dijo que las trayectorias importan.
“Son más de 34 años de quehacer para lograr una transformación”, atajó.
Narro criticó la postura de Gabriel García, en torno a que un abanderado de consenso puede ayudar a que no haya división en la bancada morenista.
“La democracia no desune cuando hay madurez política, la democracia es la que nos une. Pensar que porque vamos a ir a un proceso interno vamos a resultar peleados o se van a agudizar las contradicciones, pues no. Hay opiniones diferentes en el grupo parlamentario, pero hay respeto y unidad”, aseguró.
PAL