BATALLÓN DE PATRIMONIO CULTURAL

Guardia Nacional protege patrimonio cultural

Un grupo especializado de 363 elementos mantiene bajo vigilancia zonas arqueológicas, como las Pirámides de Teotihuacán

NACIONAL

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LABOR. El Batallón del Patrimonio Cultural busca que no se haga daño al lugar histórico, ni que haya robos de piezasCréditos: Daniel Ojeda

Con tríptico en mano y portando el uniforme de proximidad de la Guardia Nacional, Cinthya Portillo pide a dos personas que acuden a las Pirámides de Teotihuacán no extraer restos o piezas arqueológicas y denunciar cualquier irregularidad. 

Todos los días, protegen este sitio arqueológico aproximadamente 30 elementos —por turno— de los 363 que conforman el Batallón de Patrimonio Cultural de esta corporación.

“Hagan difusión de la importancia de nuestro patrimonio cultural, que no le causen ningún daño y eviten hacer alguna extracción de piezas arqueológicas”, instruye a los elementos del batallón Omar Ortiz Martínez, encargado del despliegue en las pirámides.

Este grupo especial combate los delitos contra el patrimonio cultural de México, algunos de sus integrantes están en campo y otros realizan labores de inteligencia.

Ortiz Martínez señaló en entrevista con El Heraldo de México, que una célula se encarga del monitoreo en redes sociales para detectar la venta ilícita de piezas. También revisa en internet las casas de subastas para identificar si se ofrece patrimonio cultural mexicano a nivel nacional e internacional.

Una vez que se detecta alguna pieza con el apoyo de la Policía Cibernética, se da aviso al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para que éste elabore un dictamen del objeto en venta y si se presume un delito, se presenta la denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR).

Los 363 elementos recibieron capacitación por parte del INAH, y existe la posibilidad de que los carabineros de Italia les compartan sus conocimientos en la materia, ya que ese país también cuenta con un grupo especializado, dijo.

“(La capacitación que recibimos) fue para identificar las piezas de una réplica, que es un acto ilícito, sin la autorización del INAH. La capacitación está enfocada a que tengamos ese amplio conocimiento y si, en dado caso identificamos la extracción de alguna pieza con valor histórico, podemos informar al instituto para que hagan lo conducente”, explicó Ortiz Martínez.Destacó el caso de la imagen de San Antonio de Padua, que fue robada hace 20 años en una iglesia en Morelos y encontrada en un museo de Estados Unidos.

La pieza virreinal fue entregada a autoridades mexicanas en un evento, el pasado 10 de agosto, con el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar; el fiscal Alejandro Gertz Manero, y funcionarios federales y del Buró Federal de Investigación (FBI).

La Guardia Nacional, aseguró, apoyó en temas de seguridad y traslado. “El 10 de agosto se hizo la repatriación de una estatua de San Antonio de Padua que fue robada en 2002, en la comunidad de Jiutepec, Morelos, y se dice que pertenecía a una colección en el extranjero, pero en el testamento (la persona) dejó la donación a un museo de EU, que investiga y le hace falta documentación.

“El museo entrega al consulado mexicano y el 10 de agosto la recibe Relaciones Exteriores, nosotros apoyamos con seguridad, (y el) traslado”, detalló.

CAR