TIJUANA.- Tras la pandemia del Covid-19 aumentó el número de personas que atiende el Desayunador Padre Chava ubicado en la ciudad de Tijuana, sitio en donde personas en situación de calle y migrantes acuden por alimentos.
Casas de acampar, personas dormidas sobre las banquetas y familias con maletas es lo que se observa sobre las calles de la Zona Centro, una de las zonas más conocidas de la ciudad fronteriza y cercana a la garita Internacional de San Ysidro.
La coordinadora del Desayunador Salesiano Padre Chava, Claudia Portella, dijo en entrevista que es una situación que se agravo durante la contingencia sanitaria y aunque los recursos se vieron afectados desde entonces, la comunidad se ha acercado a entregar donativos y estímulos para apoyar a la asociación.
"Muchas de las personas que están aquí anteriormente rentaban un cuartito pero tristemente por un trabajo informal y por falta de papeles han terminado en situación de calle", expresó Portella.
Alrededor de mil personas llegan diariamente para recibir alimentos, en comparación a las ochocientas que recibían en meses anteriores. Además cuentan con un albergue donde también se ha incrementado la cifra de refugiados, actualmente se encuentran 94 personas de nacionalidad mexicana y extranjera. En cuanto al refugio de mujeres y niños son 88 que corresponden a 38 menores de edad y el resto son mujeres.
"Estamos a capacidad llena, como Desayunador siempre vamos a dar respuesta humana a las personas que lo necesiten", expresó Claudia.
Cabe mencionar que además de brindarles refugio y alimentos, también los apoyan con asesoría legal para el trámite de asilo político en Estados Unidos y la asistencia de canalizarlos con autoridades municipales.
Lamentablemente, algunas personas que terminan en situación de calle se han acercado a las drogas, lo que preocupa a la asociación pues en ocasiones han tenido que atender un caso de sobredosis por semana.
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La señora Magdalena, ha dormido en las calles acompañada de sus hijos de 8 y 6 años de edad. Todos los días han acudido por alimentos al desayunador Salesiano Padre Chava y señala que es la única comida que hacen al día.
"No comemos, hay gente que nos ayuda a veces me regalan para cenar o nos dan cobijas", dijo la madre.