De las 88 millones 209 mil 816 personas con obesidad que hay en México, se estima que entre 30 y 60 por ciento padecen algún problema de salud mental, tal como depresión, ansiedad o baja autoestima, lo que contribuye a fomentar las alteraciones en su dieta, de acuerdo con el Instituto Nacional de Psiquiatría “Ramón de la Fuente Muñiz” (INPRFM).
Al respecto, el jefe del Departamento de Educación Continua de dicha institución, Héctor Esquivias Zavala, indicó que la depresión en una persona con obesidad se caracteriza por ser más grave, además de que presenta mayor número de recaídas, lo que pone en riesgo su salud.
Durante el encuentro por el Día Mundial de la Obesidad, coordinado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), señaló que, por otra parte, el tratamiento de los trastornos depresivos y de ansiedad influye positivamente en la pérdida de peso.
“Tratar estas condiciones favorece una mayor pérdida de peso; incluso, después de la cirugía bariátrica”, enfatizó.
Cabe destacar que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud (ENSANUT) 2020, al menos 34 por ciento de los mexicanos aumentaron de peso durante la pandemia, lo que deja un panorama más grave a largo plazo, pues en dos o tres años se verán los problemas de salud derivados de la obesidad.
Al respecto, el especialista del Instituto Nacional de Psiquiatría recalcó que este centro especializado estableció acciones para la atención del sobrepeso y la obesidad, entre las que destacan la promoción de lenguaje centrado en la persona, políticas de equidad en todos los entornos sociales y adherencia de profesionales de la salud mental a programas nacionales de capacitación para integrarse al nuevo paradigma de tratamiento.
Por su parte, el jefe de la Clínica de Obesidad del Hospital Infantil de México “Federico Gómez” (HIM), Salvador Villalpando Carrión, señaló que, a través de la aplicación móvil Paidós, pacientes del instituto registran el tipo y la cantidad de alimentos que ingieren durante el día, tienen acceso a rutinas de actividad física personalizada y estrategias concretas que les ayudan a identificar si la necesidad de comer es por hambre o para canalizar emociones, plan que puede ser replicado en otros ámbitos para la prevención de la obesidad.
dhfm
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