Con un monto de 13.2 millones de pesos llega a la Ciudad de México “Revolución Refill”, estrategia que busca disminuir la contaminación de plástico con la instalación de máquinas en supermercados para el llenado de los envases de productos de limpieza y aseo personal.
El programa piloto que impulsa WWF, El Foro Económico Mundial y el método Algramo, tiene como objetivo cambiar el modelo de consumo y producción para eliminar la generación masiva de botellas de plástico de un solo uso.
Cynthia Menéndez, coordinadora de Ciudades Sustentables de WWF en nuestro país indicó a El Heraldo de México que, en Chile, en donde ya lleva años este programa, han logrado disminuir 40 por ciento la producción de envases plásticos, además de que reduce los costos de los productos.
“Esto depende de la marca, de la dimensión del tipo de producto, etcétera, pero sí llega a representar por lo menos 10 por ciento de beneficio económico para el consumidor”.
Resaltó que el beneficio principal es la reducción de plástico, aunque sin dejar de aprovechar este material que puede ser importante si se utiliza de manera inteligente.
“El plástico no es un enemigo como tal; al contrario, es un material que tiene muchos beneficios, y sí nos ha aportado cosas buenas, el problema es su uso indiscriminado”, dijo.
Destacó que una de las grandes ventajas del plástico es su durabilidad, y el refill se puede utilizar en incontables ocasiones.
“Estamos estudiando cuáles son los plásticos más adecuados para lograr que su vida útil y la posibilidad de rellenarlos sea larga”, expresó.
El programa piloto iniciará en la CDMX, en el segundo trimestre del 2022. En abril, a más tardar, se colocará el primer dispensador en una de las grandes tiendas y en junio se colocarán 10 más en otros puntos de venta en la CDMX.
El sistema de Algramo pone a disposición envases inteligentes que rastrean el ciclo de vida del plástico y una plataforma en el supermercado para rellenar productos para el hogar, como detergentes, jabones líquidos y alimentos.
MAAZ