Los dueños de tortillerías en diversas regiones de Guerrero vuelven a denunciar ataques por parte del crimen organizado a sus establecimientos por negarse a pagar cuotas para seguir operando, por lo que estos delincuentes han respondido con amenazas con armas de fuego a empleados o incluso incendiando el comercio.
Durante esta semana se han difundido diversos videos en redes sociales en los que delincuentes atacan tortillerías en Guerrero, pero esto ha venido ocurriendo desde el pasado mes de junio de este año, incluso algunos propietarios han tenido que cerrar definitivamente sus establecimientos por miedo a ser víctimas del crimen organizado, quienes les exigen un cobro de piso.
En esa ocasión, mediante un video que circula en Twitter, la cámara de seguridad del local de tortillas ubicado en Ixtapa Zihuatanejo, muestra el momento exacto en el que una empleada se encuentra atendiendo a un cliente, quien cabe destacar viene acompañado de dos niños, cuando inesperadamente un sujeto se acerca.
En un primer momento parecería que iba a comprar, sin embargo, pasan tan solo unos cuantos segundos cuando de una mochila saca una pistola y posteriormente dispara hacia las maquinas de masa, inmediatamente la niña que iba acompañada de su padre se alerta y se aleja del lugar, mientras que el niño no huye pero se tapa los oídos ya que el impacto fue hecho muy cerca de él.
Por su parte, la empleada del negocio, se agacha después de percatarse de la ráfaga, sin embargo, resultó herida, por lo que una vez en el suelo comienza a arrastrarse, mientras que el delincuente emprende huida tan pronto como comete el ilícito.
Sujeto arroja bomba molotov a tortillería
En otro hecho similar también denunciado en redes sociales, ocurre algo similar, aunque en esta ocasión la agresión fue más severa. El pasado 10 de noviembre, la cámara de una tortillería en Zihuatanejo de Azueta captó el momento en que un hombre se acerca al mostrador de una tortillería y pide finge hacer una compra.
Pero cuando la trabajadora se distrae, el hombre ingresa al local y saca de una mochila una bomba molotov, la prende y la arroja a la maquinaria. Inmediatamente después la trabajadora sale corriendo para ponerse a salvo, mientras que el sujeto huye a toda velocidad.
Por estos hechos autoridades no se han pronunciado al respecto, sin embargo los ataques y extorsiones son cada vez más frecuentes y los locatarios los atribuyen a los cárteles del narcotráfico que operan en la región.
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