Este año los vivos llenan los panteones de Acapulco. Después de casi dos años de cierre, los cementerios reabrieron sus puertas a las familias para las celebraciones del Día de Muertos.
El cementerio municipal de El Palmar, ubicado a 21 kilómetros del centro, en la zona rural del puerto, el cual fue habilitado para la sepultura de las víctimas del Covid-19 recibió a unas 4 mil 500 personas.
El joven sepulturero Josué Rodríguez, quien desde pequeño asistió a su padre en el mismo oficio confiesa que de todo lo que ha visto en el panteón nada fue tan impactante como sepultar hasta 28 cuerpos al día durante “el tiempo más crítico de la pandemia”.
Recordó que durante el 2020: “llegamos a sepultar hasta 28 personas en un día, cuando antes de la pandemia, a veces teníamos solo uno nada más en la semana”.
La cifra elevada de muertes por el virus, provocó que este panteón que estaba casi vacío cuadriplicara su número de tumbas en poco menos de dos años. Tan solo durante el primer año de la emergencia, se cavaron 500 espacios. Actualmente tiene mil 200 tumbas, y ya no hay lugares, de acuerdo con las autoridades.
“La verdad no nos dábamos abasto. Aquí éramos como 18 o 20 que teníamos que trabajar, más los voluntarios se podría decir porque a veces los mismos vecinos ayudaban a la excavación de fosas. La gente moría a todas horas y aquí teníamos que estar a veces en la noche porque conforme morían se tenían que enterrar”, detalló el joven.
Josué señaló que, en El Palmar, la última persona fallecida por Covid-19 se sepultó aproximadamente hace siete meses.
Sin poder despedirse
Narró que de las cosas más triste que ha presenciado es que muchas familias no pudieron despedirse de sus padres, madres, hermanos o hijos.
“Solo entraba un familiar. Los cuerpos iban dentro de bolsas y la caja, pero jamás se abría la caja, solo sobresalía el material de la bolsa”, precisó.
En este sentido, dijo que reabrir el panteón a las familias “me causa alegría, porque ahora ellos pueden visitar a los que se les fueron y despedirlos como se debe”.
El coordinador de este panteón, Alejandro Miguel López Herrera resaltó que esta es la primera vez que el cementerio luce lleno.
“Subió bastante la afluencia en el aspecto de que las familias después de la pandemia ahora sí pueden visitar a sus seres queridos y estar ahí un rato con ellos”.
Hasta el momento, el Gobierno de Acapulco informó que 20 mil personas han visitado los más de 11 panteones municipales.
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dhfm