Al concluir su periodo como gobernador, Marco Antonio Mena Rodríguez dejará un estado con deficiencias en materia educativa, cifras preocupantes en empleo formal y sin condiciones que hagan de Tlaxcala un estado competitivo.
El Instituto Mexicano de Competitividad (Imco) ubicó a Tlaxcala en su índice de capacidad en la posición número 28 de las 32 entidades federativas de México, sitio que refleja los magros resultados en diversos rubros durante el gobierno priista de Marco Mena.
El índice que evidencia la capacidad para forjar, atraer y retener talento e inversión a los estados, está compuesto por 72 indicadores que forman 10 subíndices y, de forma general, Tlaxcala está en el grupo de competitividad bajo que integra junto con Tabasco, Chiapas y Guerrero.
Uno de los mayores fracasos del gobierno de Marco Mena tiene que ver con el sector educativo, toda vez que retrocedió 13 posiciones y ahora es la última entidad en rendimiento académico por cuanto hace al porcentaje de alumnos en nivel de desempeño; también bajó tres escaños en grado de escolaridad y cobertura educativa para posicionarse en los sitios 21 y siete, respectivamente.
El mandatario no únicamente retrocedió en los rubros antes referidos, sino que también incumplió con sus promesas de garantizar internet gratuito para toda la población y su programa de becas no cumplió el propósito de evitar la deserción escolar.
Datos de la SEP estatal refieren que en entre el ciclo escolar 2019-2020 y 2020-2021 la matrícula escolar disminuyó por falta de recursos económicos provocados por la pérdida de empleos.
El empleo formal es otro pendiente que dejará la administración de Marco Mena, pues a pesar de que en 2016 se comprometió a crear cinco mil plazas laborales anuales con mejores salarios, el índice de competitividad estatal del Imco de 2021 refiere que Tlaxcala disminuyó nueve posiciones en población ocupada.