Las zonas consideradas como sagradas para los pueblos originarios como el de Wirikuta en la Sierra de Catorce en San Luis Potosí, debe atenderse urgentemente en materia medioambiental y asegurar las áreas naturales, y luego de realizar un recorrido en esta zona, siete organismos de defensoría de derechos humanos se pronunciaron para que se atiendan zonas donde habitan pueblos originarios que comprenden estados de Jalisco, San Luis Potosí, Nayarit, Durango y Zacatecas.
Empresas de crianza de ganado porcino o aves, cuyos desechos no son controlados o proyectos que comprometen la dinámica de plantas y animales traspasan fronteras y como parte de este pronunciamiento se exige que se atiendan derechos fundamentales como la garantía de la salud y a un medio ambiente sano.
"Lo que está sucediendo en Autlán (Jalisco) como en Wirikuta, urge la regulación y la aplicación de la regulación ambiental, de una manera no selectiva, sin corrupción, anteponiendo el principio pro persona en todo momento, estableciendo criterios de sustentabilidad, de mitigación de efectos de la aplicación de pesticidas, la reparación inmediata del daño de niñas y niños de quienes se ha documentado que conviven con una cantidad importante de pesticidas en su organismo", detalló Tunuari Chávez González, encargado de la Unidad de Análisis y contexto de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Jalisco (CEDHJ).
Chávez González insistió que este pronunciamiento es relevante al sentar un precedente para que se responda por parte de las distintas instancias gubernamentales de acuerdo con sus facultades y que no son ajenas a los territorios donde habitan pueblos indígenas y que por lo pronto, en Jalisco se trabaja también en la CEDHJ para emitir una nueva recomendación en este sentido sobre la contaminación que aqueja en el municipio de Autlán.
"La empresa que se está expandiendo de manera brutal en San Luis Potosí, se llama ProAn (Proteína Animal), es la empresas que distribuye diferentes productos en muchas partes de México y del extranjero y tiene su origen en Jalisco, opera en la región Altos de Jalisco… y tiene incluso demandas ambientales en Jalisco por el mal manejo de escretas al aire libre y hay demandas y algunas clausuras que ya han realizado la Profepa en sus instalaciones por esta razón, es decir, hay empresas que están actuando de manera irresponsable".
La contaminación en mantos acuíferos y sobre explotación de recursos naturales, va más allá de las fronteras de las entidades y la afectación en este sentido también vulnera a los derechos humanos de la población originaria, uno de los principales también es la salud y la incursión de grupos del crimen organizado afecta a otros derechos como educación y cultura.
"Que la situación de seguridad en todo momento se dimensione como tal y en todo momentos que se tengan escenarios de violencia en la región norte y en cualquier región del Estado lo que sucede no solamente es el derecho violentado a la seguridad ciudadana, a la integridad personal, también se coarta la posibilidad de acceder a los derechos de salud, educación, a la cultura incluso en el caso de los pueblos originarios, entonces si es la atención a los territorios como en Wirikuta, tienen efectos relacionados y que también se señala en el pronunciamiento porque allá también hay presencia de grupos del crimen organizado".
La zona de Wirikuta es un lugar sagrado para el pueblo wiraxika, que habita en Nayarit, Durango, San Luis Potosí y Jalisco y la tradición de este pueblo originario que habita alrededor de cinco mil 300 kilómetros cuadrados del país, y es un área de importancia para la conservación de aves, ocupa el 0.3 por ciento del desierto Chihuahuense y el 60 por ciento de la flora de este desierto se concentra ahí y es el lugar en donde crece el peyote, planta de identidad del pueblo wiráxika.
atm