En el Estado de México prácticamente ningún trabajador agropecuario cuenta con seguridad social (apenas .05 por ciento lo tiene), por lo que durante la pandemia este sector tuvo que acudir a servicios médicos privados, lo que ocasionó una importante merma en su economía, aseguró el presidente de este segmento en el Consejo Coordinador Empresarial (CEEM), Javier Reyes Escamilla.
De acuerdo con el Visualizador Analítico para la COVID-19 del Inegi, 20.63 por ciento de la población del Edomex no tiene acceso a la seguridad social, es decir, tres millones 339 mil 163 mexiquenses; mientras que los que sí tienen son 12 millones 738 mil habitantes.
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Reyes Escamilla destacó en entrevista que en los casos de contagio de coronavirus, los productores agropecuarios han tenido que vender sus animales o parte de su producción para que ellos, o sus familiares, sean atendidos por médicos privados.
Esta situación, sumada a la baja en ventas de 50 por ciento, generó graves afectaciones en su patrimonio durante la contingencia.
“Cuando uno vende el animal, de 20 a 30 por ciento es la ganancia, lo demás es reinversión; pero, en este caso, todo lo que se obtenía se iba al pago de médicos y medicamentos porque a diferencia de los obreros o empleados de gobierno, nosotros no tenemos ningún seguro. La situación se agudizó más”, comentó Reyes Escamilla.
Alrededor de dos millones 300 mil mexiquenses dependen de la actividad primaria en la entidad, considerando los empleos directos, indirectos y sus familias.
Según el Programa Estatal 2017- 2023 la Población Económicamente Activa (PEA) en el Edomex es de seis millones 507 mil 365 personas, de las cuales, 3.44 por ciento son trabajadores agropecuarios, es decir, 223 mil 840 mexiquenses.
“Desgraciadamente no tienen acceso a ningún sistema de salud”, coincidió Felipe López González, investigador de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM).
Por Leticia Ríos
dza