A pesar del calor de 42 grados centígrados, cientos de familias tabasqueñas están saliendo de sus hogares para apreciar el florecimiento de los árboles de Guayacán en todo el estado. Como bien dice una conocida frase, cuando el calor enloquece, el guayacán florece.
Y es que para aprovechar el hermoso espectáculo, hay muchas familias que incluso contrataron fotógrafos profesionales para hacerse toda una sesión debajo de estos majestuosos arboles que cada año, forman un tapete de flores de color amarillo que muestran un espectáculo único.
Para muchas de las familias que salen de sus hogares a disfrutar del florecimiento de los Guayacanes es como una nevada de vida, ya que justamente ocurre cuando aumentan las temperaturas y casi todos los árboles de esta especie florecen al mismo tiempo y tiran sus pétalos casi a la misma hora.
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En la ciudad de Villahermosa hay varias avenidas como Paseo Tabasco, la avenida 27 de febrero y Esperanza Iris que tienen en sus banquetas varios árboles de esta especie, por lo cual, circular por estas zonas cuando los árboles florecen genera un espectáculo sumamente sorprendente.
Curiosidades del guayacán
Su nombre científico es Tabebuia Chrysantha y es un árbol originario de la zona intertropical de América. Tiene una media de 12 a 15 metros de altura, de tronco fuerte, compacto, recto, cilíndrico y de aproximadamente 60 centímetros de diámetro.
La madurez del capullo se da entre los meses de mayo a agosto, durante la época seca. Para el periodo de lluvias, las semillas empiezan a germinar y el crecimiento es lento, pero tiene una larga existencia.
El Guayacán se diferencia de otras especies maderables porque, luego de las primeras lluvias (diciembre y enero), no emite hojas sino un botón floral que al inicio es verde. Después de siete días su capullo se abre y sus flores se tornan amarillas, además de que este espectáculo dura sólo de cuatro a seis días.
Por Javier Armando de la Rosa Valdez
EAA