Junto a los estados de Yucatán y Quintana Roo, Campeche forma parte de la península que esconde maravillas de la cultura maya, la conquista y, por supuesto, de los piratas que inspiraron leyendas y novelas de aventuras.
Campeche cierra la frontera con Belice y Guatemala. Su ciudad está situada frente al mar, es bañada por las aguas del Golfo de México y apenas supera 200 mil habitantes.
Víctima de los piratas
Debido a su excelente localización, fue uno de los puertos más importantes durante la etapa colonial. Desde los muelles zarparon a España numerosas embarcaciones que, entre otras cosas, transportaron riquezas en forma de “palo de tinte”, un árbol fundamental para teñir telas en varios colores. Gracias a la movilización y el comercio en barcos, este lugar también fue víctima de los piratas.
La piratería apareció en San Francisco de Campeche por el monopolio comercial que España impuso en los productos de la región y llegó a tal grado que la intervención del rey Felipe IV no fue suficiente para frenar a famosos piratas como John Hawkins, Francis Drake, Cornelius Jol, Michel de Grandmont o Henry Morgan.
El pirata más famoso del estado
Aunque los saqueos se convirtieron en una costumbre, hubo un pirata que dejó su nombre marcado en la historia de la ciudad. El holandés Laurens de Graaf, conocido como Lorencillo, fue tan importante que, ahora, una réplica de su barco surca las aguas de la ciudad.
Gracias a él y a sus estrategias para robar, las autoridades de Campeche tuvieron que mejorar sus defensas. En 1704 construyeron una muralla que rodeaba la ciudad para evitar el ataque de los piratas.
La muralla contaba con 4 puertas al exterior, 8 baluartes y, además, estaba por cuatro fuertes. Actualmente es posible visitar estas fortificaciones convertidas en miradores y museos. Sin embargo, de la muralla apenas quedan unos cuantos tramos en pie.
Campeche fue inscrita en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO en 1999
La ciudad cuenta con calles llenas de color, fuertes, baluartes y una historia maravillosa sobre la construcción del país, pues su puerto fue una pieza fundamental de comunicación e intercambio de mercancías entre España y lo que ahora es México.
Campeche fue una de las pocas ciudades amuralladas del continente. Si te interesa conocer más al respecto, puedes visitar tres de sus fuertes y baluartes más importantes: El Fuerte de San José, el Fuerte de San Miguel y el Baluarte de la Soledad.
El centro histórico está lleno de encanto. Además, en la ciudad podrás encontrar viejas casonas coloniales con portones asombrosos y enormes ventanales. Los colores que pintan las casas son otra de las características de Campeche, convirtiéndolo en uno de los destinos más fotogénicos que podrás encontrar en México.
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