El Juzgado Segundo de Distrito vinculó a proceso al exgobernador de Puebla, Mario Marín Torres, acusado de autoría intelectual del delito de tortura, en contra de la periodista, Lydia Cacho Ribeiro.
Por su parte, la organización Artículo 19 que conduce la defensa de la escritora de “Los Demonios del Edén” y “Esclavas del Poder”, celebró el fallo del juez Segundo, Gerardo Vázquez Morales.
“La justicia no será plena hasta que el exgobernador sea condenado y, junto a él, todos los autores intelectuales que permanecen prófugos”, señaló la agrupación.
Las declaraciones de la organización son en referencia al empresario, Kamel Nacif Borge y el exdirector de la otrora Policía Judicial de Puebla, Adolfo Karam.
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De acuerdo con Artículo 19 la justicia debe garantizar la reparación completa del daño en contra de la periodista y su familia.
El pasado 3 de febrero el exgobernador fue detenido en Acapulco, Guerrero, en cumplimiento de una orden de aprehensión, librada por el Tribunal Unitario del Vigésimo Séptimo Circuito y trasladado hacia Cancún para responder sobre el delito que le es imputado.
El 4 de febrero, durante la audiencia para rendir su declaración preparatoria,el también conocido como “Góber precioso” se reservó el derecho; pidió la duplicidad del término constitucional de 77 a 144 horas para la definición de su situación legal y, durante ese lapso, el beneficio de la prisión domiciliaria, que le fue negado por las autoridades.
Desde su arribo a Cancún se encuentra interno en el Centro de Readaptación Social de esta ciudad, en donde también se encuentra el pederasta confeso, Jean Succar Kuri, sentenciado a 112 años y seis meses de cárcel, por el delito de pornografía infantil.
En esa misma prisión se encuentra interno, Alejandro Rocha Laureano, comandante de la entonces Policía Judicial de Puebla, detenido en diciembre de 2018.
Mario Marín fue gobernador de Puebla de 2005 y 2011, y estuvo en la presidencia municipal de la capital de 1999 al 2000. Fue secretario del edil de Puebla entre 1987 y 1990, Guillermo Pacheco Pulido, y fue secretario de Manuel Bartlett Díaz de 1993 a 1999.
En 2015 se le imputó la acusación de tortura contra la periodista Lydia Cacho, que había publicado el libro titulado “Los demonios del Edén”, una investigación que acusa a Marín y al empresario Kamel Nacif de promover una red de pederastia.
Luego de la publicación, los acusados de la red de pederastia la denunciaron por difamación y calumnias logrando su detención el 16 de diciembre de 2016 en Quintana Roo.
La periodista fue trasladada vía terrestre a Puebla. Sin embargo, en el trayecto de más de mil 500 kilómetros, fue torturada psicológicamente por los oficiales que la llevaban detenida y la amenazaban con abusar sexualmente de ella.
El 17 de diciembre salió libre luego de pagar una fianza de 70 mil pesos y poco después tuvo que autoexiliarse debido a la persecución que sufría ella y su familia.
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