Para evitar que a nivel nacional los periodistas tengan que revelar sus fuentes, el diputado de Morena, Ricardo Fuentes presentó una iniciativa para reformar y adicionar diversas disposiciones en el Artículo 6º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de Cláusula de Conciencia y Secreto Profesional de los Periodistas.
En la exposición de motivos, durante la segunda sesión de la Comisión Permanente el Secretario de la Comisión de Protección a Periodistas, indicó que “es de suma importancia armonizar estos derechos que ya están en la Constitución Política de la Ciudad de México y en la Ley del Secreto Profesional y Cláusula de Conciencia para el Ejercicio Periodístico local.
Señaló que con ello, se blindará de mejor manera el trabajo de los profesionales del periodismo, y por ende se revalorizará la calidad de la democracia.
Fuentes Gómez recordó que el 8 de junio de 2020, el gobierno de la Ciudad de México promulgó la Ley del Secreto Profesional de Periodistas y Cláusula de Conciencia para el ejercicio periodístico, que protege a los periodistas y sus colaboradores para que bajo ninguna causal tengan que revelar cómo obtienen la información.
“Si bien en la Constitución Política de la Ciudad de México se garantiza la seguridad de las personas que ejercen el periodismo, no lo es así nuestra Carta Magna de los Estados Unidos Mexicanos. Lo anterior nos lleva a reflexionar de la importancia de crear mecanismos que protejan el ejercicio de la labor periodística, debido a que en los últimos 10 años se ha presentado una enorme violencia contra el gremio”, resaltó,
El diputado por el distrito 5 Miguel Hidalgo-Azcapotzalco comentó que la iniciativa la presenta considerando el pronunciamiento del Presidente López Obrador sobre el derecho a la libertad de expresión con relación a la negativa del gobierno británico a la extradición de Julianne Assange.
La iniciativa fue turnada a la Comisión de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas, con opinión de la Comisión de Protección a Periodistas.
Por: Jorge Almaquio García