Recientemente en la conmemoración del 52 aniversario de la matanza estudiantil del 2 de octubre, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Gobernación presentó la Política de Verdad y Memoria del Pasado Reciente, que tiene como objetivo dar a conocer los abusos del Estado mexicano desde los años 60 hasta los 80.
De tal modo la Subsecretaría de Derechos Humanos Población y Migración, representada por Alejandro Encinas, el Archivo General de la Nación (AGN), el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), y el Gobierno de la Ciudad de México (CDMX), firmaron un convenio de colaboración.
¿Qué acciones se van a llevar a cabo?
Entre los planes de esta iniciativa se pretende retirar los nombres de personajes denominados “represores” en sitios y obras públicas del país, los espacios que se utilizaron para torturar se convertirán en museos y se reestablecen efemérides nacionales.
"...entregar a familiares de desaparecidas y desaparecidos, de luchadores sociales, de periodistas, los archivos de este Estado autoritario, tiene un simbolismo enorme”, dijo la jefa del Gobierno Claudia Sheinbaum en la ceremonia el 2 de octubre.
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Ejemplo:
Actualmente el Aeropuerto Internacional de Puerto Vallarta, lleva el nombre de quien fuese presidente durante la masacre de estudiantes del movimiento estudiantil del 2 de octubre, Gustavo Díaz Ordaz, por lo que el subsecretario mencionó que se buscará cambiar el nombre a la terminar aérea, a la que diariamente arriban decenas de turistas, tanto nacionales como extranjeros.
“No puede ser que sigamos teniendo en Puerto Vallarta un aeropuerto Gustavo Díaz Ordaz, o de otras gentes que cometieron estos actos criminales contra mexicanas y mexicanos", dijo Encinas.
En Ciudad de México
Por su parte la jefa del Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, mencionó que se analizan cambios de nombres de calles y colonias en la capital. Dijo que próximamente comenzará la consulta a vecinos para obtener el visto bueno a estos ajustes.
"Ya lo vamos a anunciar. En algunos casos cuando hay cambio de nombre de calle o de colonia, se tiene que consultar con los vecinos. En algunos casos no quieren cambiar porque significa modificación de escrituras y prefieren que no sea así. Antes de anunciarlo, preferimos consultar con la población y a partir de ahí poder hacer los anuncios", dijo.
Además, mencionó que se analiza la posibilidad de poner placas conmemorativas en algunos sitios, así como la posibilidad de cambios de nombre.
Calles del Centro Histórico cambiaron de nombre por el de los 43 normalistas desaparecidos hace 6 años en Iguala. Foto: Cuartoscuro