El Papa Francisco durante la Audiencia General celebrada esta mañana, dedicó su catequesis al consumo de drogas puesto que se celebra la Jornada Mundial contra el abuso y el tráfico ilícito de éstas.
Francisco pidió rezar por la “conversión” de los que distribuyen las drogas a los jóvenes, “son criminales, son asesinos. Recemos por su conversión”.
En su catequesis, el Santo Padre llamó “traficantes de muerte” a los que se dedican a la distribución de las drogas.
“Después de haber conocido tantas historias trágicas de toxico-dependientes y de sus familias, estoy convencido de que es moralmente correcto acabar con la producción y el tráfico de estas sustancias peligrosas. Cuántos traficantes de muerte hay, porque los traficantes de droga son traficantes de muerte, movidos por la lógica del poder y del dinero a cualquier precio”.
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“Cada tóxico-dependiente trae consigo una historia personal distinta, que debe ser escuchada, comprendida, amada y, en cuanto posible, sanada y purificada. Siguen teniendo, y más que nunca, una dignidad en cuanto personas que son hijos de Dios”.
El Papa Francisco pidió que se termine la producción y el tráfico de drogas
“La reducción de la drogadicción no se consigue liberalizando el consumo, esto es una fantasía, como se ha propuesto, o ya se ha aplicado, en algunos países. Y esto: se liberaliza y se consume más. Después de haber conocido tantas historias trágicas de drogadictos y de sus familias, estoy convencido de que es moralmente justo acabar con la producción y el tráfico de estas sustancias peligrosas”.
Ante la presencia de miles de fieles y visitantes en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco pidió “no ser indiferentes”
“También nosotros estamos llamados a actuar, a detenernos ante las situaciones de fragilidad y dolor, a saber escuchar el grito de la soledad y la angustia, a inclinarnos para levantar y traer de vuelta a la vida a aquellos que caen en la esclavitud de la droga”.