El torso desnundo de Almita ya sin cabeza fue encontrado en la ciudad de Yacuiba en Bolivia, muy cerca de la frontera con Argentina hace 8 años. Las extremidades de la joven fueron halladas también en el municipio considerado como de los más violentos de aquel país. Hasta la fecha nadie sabe quién era ni qué fue lo que le pasó a la víctima, solo se conoce que sufrió mucho por la forma de morir por lo que se convirtió en una santa.
Una de las teorías sobre lo que le pudo haber pasado a Almita es que llevaba droga hacia Argentina, pero en el camino fue interceptada por otros integrantes del narcotráfico quienes la desmembraron para sacar las cápsulas con cocaína que la joven mujer llevaba dentro de su estómago. Tras cometer el atracó y el asesinato, los restos de Almita quedaron en la línea fronteriza.
Desde entonces, los habitantes de la zona que la encontraron la llamaron Almita Desconocida. Dicen los lugareños que cualquier cosa que le pidas, ella lo puede cumplir. De un momento a otro, de pronto el torso de Almita fue protegido en un altar dentro del panteón de San Gerónimo dentro de la ciudad fronteriza.
Almita Desconocida sufrió tanto que ahora hace milagros
Aunque también se cree que Almita fue víctima de la violencia machista o de un ajuste de cuentas entre narcos de Yacuiba, lo cierto es que los testigos de sus “milagros” afirmaron que tiene el don de cumplir cualquier petición ya que sufrió tanto durante la tortura por la que pasó que le fue concedido ese don, según información de Vice.
El altar donde reposan los restos de Almita Desconocida es un cubículo de dos metros por dos. Siempre está ataviado con flores, velas y varias cartas que la gente le escribe para que los ayude con sus malestares que los aquejan. Por lo mismo, el altar casi nunca está vacío, por lo menos siempre hay alguna persona que camina hacia Argentina o regresa a Bolivia que se detiene para visitar a Almita Desconocida.
"Yo tenía un cáncer y me lo quitó. Es una hermana que se preocupa por nosotros", dice Eilyn en un foro de internet al que ha llegado la fama de Almita.
Almita, la santa de los narcos
El investigador Fernando Salazar, del Instituto de Estudios Sociales y Económicos de Bolivia afirmó para el medio citado que Almita fue convertida en una santa por la gente debido a la brutalidad como fue encontrado su cuerpo:
"La brutalidad de su asesinato conmovió tanto a esta población que se enfrenta constantemente a los ajustes de cuentas, violaciones, torturas y demás; que la tomaron como símbolo y por una cuestión de culpa o arrepentimiento, los propios mafiosos han puesto su fe también en ella", expresó Fernando Salazar.
Almita se transformó en la homóloga boliviana del santo Malverde en Sinaloa, donde fue nombrado el santo de los narcotraficantes. La diferencia es que Malverde fue un asaltador de caminos y de hecho, se duda de su existencia real. De Almita se sabe que existió, sufrió y murió, pero no el porqué de tanta devoción. Pero gran parte de sus fieles son narcotraficantes, sicarios, mulas y contrabandistas que le piden ayuda en sus misiones