Victoria Stainton, una madre soltera de Lincolnshire, Reino Unido, ha compartido con NeedToKnow.co.uk su desgarradora lucha para cuidar a su hijo de ocho años, Harrison, después de que le diagnosticaran una enfermedad mortal.
Según Victoria, los médicos inicialmente pasaron por alto las señales de enfermedad. La preocupación de Victoria surgió cuando Harrison experimentó dificultades para respirar, lo que llevó de emergencia al hospital.
Aunque los médicos inicialmente creyeron que los síntomas eran causados por estreñimiento, una radiografía de tórax reveló un problema grave: los pulmones de Harrison estaban llenos de líquido.
El diagnóstico final en noviembre de 2022 fue de un linfoma linfoblástico de células T, un cáncer agresivo. Victoria quedó destrozada y asustada al escuchar esas palabras para su amado hijo.
Tuvo que dejar su trabajo para convertirse en el cuidador de tiempo completo de Harrison, ya que el cáncer requería un tratamiento intenso y el uso de un tubo para alimentarlo.
El tratamiento incluye quimioterapia tres veces a la semana, inyecciones de anticoagulantes, drenaje de tórax y otros procedimientos médicos.
Enfermedad los deja en bancarrota
La situación financiera de Victoria se volvió difícil, ya que se vio obligada a dejar su trabajo y asumir la responsabilidad de los gastos adicionales relacionados con el cuidado de Harrison. Con el sistema inmunológico comprometido de Harrison, no pueden usar el transporte público y los costos de estacionamiento se suman.
Ahora la generosidad de los demás es lo que los mantiene a flote. El padre de un compañero del colegio de Harrison creó una página de GoFundMe para ayudar con los gastos.
Es importante señalar que el tratamiento de Harrison ha afectado su capacidad para comer, y se alimenta principalmente a través de una sonda nasogástrica.
Victoria señala que todos los días se asegura de que, cuando puede comer alimentos sólidos, el pequeño pueda disfrutar de sus comidas favoritas, sin embargo la situación ha sido desafiante.
La madre de Harrison, se dice aliviada de saber que podrá regresar a su trabajo una vez que la salud de su hijo mejore.
Es muy importante señalar, que durante el tratamiento, Harrison ha acumulado cuentas de colores -pequeñas bolitas que se usan para formar pulseras- llamadas "Beads of Courage", que representan cada procedimiento médico al que se somete.
Esta iniciativa respaldada por Children with Cancer UK brinda apoyo emocional a los niños. Harrison muestra con orgullo su colección de cuentas y se enorgullece de explicar su significado a los visitantes.
A pesar de su propia lucha, Harrison también se preocupa por los demás y ha recaudado fondos para el grupo Children's Cancer and Leukaemia vendiendo calcomanías y llaveros a vecinos y compañeros de clases
Sin lugar a dudas, la historia de Victoria y Harrison resalta la importancia de estar atentos a los síntomas y buscar una segunda opinión médica si es necesario en cada uno de los padecimientos. También destaca cómo el amor y el apoyo de la comunidad pueden marcar la diferencia en la vida de una familia que enfrenta una enfermedad potencialmente mortal.