Un dirigente del grupo yihadista Estado Islámico, responsable de planificar atentados en Europa, murió en un ataque en Siria, informó el mando del ejército estadounidense para Oriente Medio (Centcom).
Khaled Aydd Ahmad Al Jaburi era entre otras cosas responsable de la planificación de atentados del Estado Islámico en Europa, indicó el Centcom estadounidense en un comunicado, subrayando que su muerte perturbará temporalmente la capacidad de la organización para fomentar ataques en el extranjero.
El grupo Estado Islámico reivindicó una serie de atentados en Europa durante su apogeo, cuando controlaba amplias zonas de Siria e Irak, donde había proclamado un califato.
El Estado Islámico reivindicó los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París, donde hubo 130 muertos, así como el atentado de Niza del 14 de julio de 2016 en el sureste de Francia, con 86 muertos. También en 2016, tres atentados suicidas en Bélgica, principalmente en la zona de Bruselas, causaron 30 muertos.
Un año después, los atentados en España del 17 y 18 de agosto, uno de ellos en Barcelona, causaron 16 muertos. El mando militar estadounidense dijo que el ataque se llevó a cabo en el noroeste de Siria y que no hubo civiles muertos ni heridos.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), un dron estadounidense apuntó al líder del EI en la provincia de Idlib, en una zona controlada por los yihadistas en el noroeste de Siria.
El hombre, un iraquí que se hacía pasar por sirio y se hacía llamar Jaled, se había refugiado en esta zona hace diez días, indicó el Observatorio, que cuenta con una amplia red de informantes en Siria. Fue blanco del dron cuando caminaba cerca de su casa y hablaba por teléfono, según el OSDH.
"El Estado Islámico sigue representando una amenaza para la región y más allá", dijo el jefe del mando del ejército estadounidense para Oriente Medio, el general Michael Kurilla, citado en el comunicado del Centcom.
"Incluso debilitado, el grupo sigue siendo capaz de llevar a cabo operaciones en la región, con la intención de golpear más allá de Oriente Medio", añadió.
Desde la derrota territorial del Estado Islámico en Siria en 2019, varios centenares de soldados estadounidenses, desplegados en el noreste del país como parte de la coalición antiyihadista, han seguido combatiendo junto a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), dominadas por los kurdos, atacando a presuntos miembros del Estado Islámico.
Estados Unidos anuncia con frecuencia que tiene en su punto de mira a responsables del Estado Islámico que se han refugiado en Siria.
En octubre de 2019, el ejército estadounidense anunció la muerte del líder del Estado Islámico, Abu Bakr Al Baghdadi, en una operación estadounidense en el noroeste de Siria.
El 16 de febrero, el ejército estadounidense dijo que había matado a un líder del grupo extremista en una incursión en el noreste de Siria, en la que resultaron heridos cuatro soldados estadounidenses.
En 2022, otros dos líderes del grupo fueron abatidos, uno en febrero por fuerzas especiales estadounidenses en el noroeste y el otro en octubre por exrebeldes en la provincia de Deraa, apoyados por el régimen.
A pesar de su derrota territorial, el Estado Islámico sigue perpetrando atentados en Siria, donde el grupo yihadista atacó recientemente a civiles que recogían trufas en el desierto, matando a decenas de personas.
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