Christy Bautista era una joven de 31 años que tenía una vida por delante, pero un exreo - George Sydnor, Jr., de 31 años- terminó con ella de manera brutal, la apuñaló 30 veces hasta matarla. Ellos coincidieron en el hotel Ivy City, de Washington DC, a donde ella llegó para asistir a un concierto. Tenía alrededor de una hora que se había registrado y ocupado la habitación. Era el viernes 31 de marzo de 2023 cuando el hombre cometió el asesinato.
De acuerdo con los testigos, Bautista recién había llegado a hospedarse, estacionó su automóvil frente a la habitación 116, la misma donde la vida le fue arrebatada. Alrededor de 10 minutos después de que entró, Sydnor fue visto llegando en una bicicleta, en las imágenes también se observa que antes de entrar, está escuchando detrás de la puerta. Hasta el momento no se ha dado a conocer la manera en que logró ingresar a donde su víctima descansaría tras terminar su evento.
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Al poco tiempo, las personas que se encontraban en el recinto comenzaron a escuchar gritos que pedían ayuda una y otra vez, por lo que llamaron al 911. Cuando la policía llegó, tocó a la puerta de la habitación, a través de la persona el hombre salió a decirles que todo estaba en orden, pero estaba completamente cubierto de sangre.
Los agentes fueron por la llave maestra y abrieron la habitación del hotel, Sydnor estaba tratando de fumar un cigarro que al igual que sus manos y ropas, estaba lleno de la sangre de Christy Bautista. Vieron que la joven yacía inconsciente en el piso, con múltiples puñaladas en todo el cuerpo, al revisarla notaron que ya no contaba con signos vitales.
El sospechoso fue detenido por la policía, quien en ese momento tenía dos órdenes de arresto, una de ellas en la misma ciudad donde cometió el asesinato de Bautista, pues una muejr lo demandó por haberla asaltado a punta de pistola. La otra también es por hurto, pero en Maryland.
Sydnor está detenido sin derecho a fianza, aunque el abogado que lo representa afirma que su cliente es inocente. De acuerdo con las investigaciones, víctima y victimario no tenían ninguna relación, ni siquiera se conocían.
Una de las tías de la víctima dijo a Fox5 DC que Christy “trajo alegría a todos los que la conocieron y fue una luz brillante en todas nuestras vidas". Agregó que la familia está devastada por su muerte y pidió respeto a su privacidad.
DMGS
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