Un hombre muy afortunado de Lytham St Annes —localidad situada en el condado de Lancashire—, Inglaterra, Reino Unido, vivió el sueño de todo viajero, trasladarse en un avión comercial sin ningún otro pasajero más que él y la tripulación. El glorioso momento vino acompañado de un registro de equipaje sin fila, un aeropuerto prácticamente vacío y la sorpresa de ser el único que abordó la aeronave. Identificado como Paul Wilkinson, este sujeto fue llamado por el personal de la cabina como "rey" y todo el tiempo se le brindó un servicio VIP.
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Voló para reunirse con su familia en Belfast, Reino Unido
Paul Wilkinson de 65 años se encontraba en la capital de la región de Algarve en el sur de Portugal, Faro. Programó su regreso a Inglaterra el pasado 30 de marzo pero comenzó a entrar en pánico cuando llegó pues no había nadie formado ni a la hora de pasar el equipaje ni al momento de abordar el avión que lo llevaría de regreso a casa. Asustado le preguntó al personal del aeropuerto si su vuelo se había retrasado o en el peor de los casos cancelado, pero le respondieron que él era su invitado VIP y que sería el único a bordo.
Aunado a esto, el gerente de proyecto, Paul Wilkinson, no solo viajó solo en el avión Jet2, también abordó un autobús de lanzadera doble solo y ya en el aeropuerto pudo elegir los asientos del vuelo. Detalló que la tripulación de la cabina lo trató como a la realeza y lo llamó "Rey Paul" durante todo el traslado, mientras se estiraba en la primera fila e incluso conversó con el capitán antes del despegue.
"Era como estar en mi propio jet privado. Alguien me dijo que un jet privado está en la región de 28 mil libras esterlinas y probablemente nunca vuelva a suceder. No había nadie en la puerta, lo que me pareció extraño. Hablé con los comisarios que esperaban para tomar los pasaportes y me dijeron: oh, señor Paul, usted es VIP hoy. Está volando solo.", detalló Paul Wilkinson.
El hombre de 65 años pensó que se estaban burlando de él o que era una cámara oculta. Incluso también intentó darle explicación al hecho creyendo que había llegado antes de la hora. Pero fue todo lo contrario, en menos de cinco minutos llegó su avión por él y él tuvo toda una experiencia surrealista. Él esperaba una gran cantidad de personas y turistas que abordarían el avión, sin embargo no lo hicieron. La aeronave apareció, se subió a ella y solo vio al capitán y a la tripulación.
"Simplemente no parecía correcto. Pensé que en cualquier momento iban a decir que se había cancelado y que había habido una gran confusión. La tripulación de cabina sonreía, seguían llamándome King Paul. Les pregunté si estaban bromeando, pero dijeron que tenía el avión para mí solo, que podía hacer lo que quisiera, pedir lo que quisiera.", compartió.
Detalló que el servicio fue insuperable, pues le hicieron una demostración de seguridad uno a uno, le dejaron tomar fotografías y el capitán salió y conversó él. En broma pidió un reembolso por su asiento pagado pues no se podía creer que caminara por el avión, escogiera los baños a los que quiso pasar y que el vuelo de tres horas solo le hubiese costado 130 libras esterlinas, o sea 2 mil 930.44 pesos mexicanos. El padre de uno también se saltó las colas en el control de pasaportes y en la recogida de equipaje al llegar a su destino.
"Mi maleta se recuperó sola porque yo era el único en el reclamo de equipaje. Fue excelente, estaban a mi entera disposición, ahora estoy mimado. La próxima vez preguntaré cuántas personas hay en el avión".
Solo fue por unas vacaciones de golf y regresó para ser atendido como rey
Cabe destacar que Paul Wilkinson había dejado antes unas vacaciones de golf en Portugal para reunirse con su esposa Deborah, de 52 años, que viajaba desde Manchester hacia Belfast, Inglaterra para un funeral. Mientras ella viajaba apretada en otro vuelo, el tenía todo un jet para él.
"Creo que fue totalmente excepcional. Habían llevado turistas a Portugal y no había nadie para regresar y fue pura suerte que necesitaba ir a Belfast. En el control de pasaportes no podían creer que yo era el único que bajaba del avión, tres de ellos hicieron mi pasaporte , uno lo revisó y el otro lo selló, todo fue de buen humor.", detalló.
Un portavoz de Jet2 dijo se encontraban encantados de que el señor Wilkinson haya podido experimentar su "galardonado servicio al cliente al más puro estilo VIP", explicaron que su vuelo de ida a Faro desde Belfast International estuvo particularmente ocupado con muchos turistas felices que se dirigían al sol portugués. Sin embargo de regreso fue la única persona. Esta no es la primera vez que pasa un hecho así, pues de las Islas Fiji también ocurrió una situación similar. Estas personas fueron ascendidas a clase ejecutiva cuando eran las únicas tres personas que abordaron su vuelo de British Airways.
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