El asesino de cinco personas que tiroteó dentro un banco en el centro de Louisville, Kentucky en Estados Unidos, fue identificado como Connor Sturgeon, quien durante su época como estudiante de secundaria, era uno de los mejores atletas de la escuela, pero también sufrió graves golpes en su cabeza que lo llevaron a padecer varias conmociones cerebrales.
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Por lo anterior, el joven pistolero utilizaba siempre cascos especiales durante sus partidos de básquetbol, indicó uno de sus compañeros de clases citado por el Daily Beast. Cuando era estudiante de primer año en el Floyd Central High School en Floyds Knobs, Indiana, Connor Sturgeon era un atleta comprometido con el deporte, lo mismo jugaba básquetbol, futbol americano y competía en atletismo.
En la escuela, Connor era apodado como “Mr. Floyd Central” ya que su papá era el entrenador en jefe del equipo de básquetbol, que en cada encuentro siempre usaba su casco por las múltiples conmociones cerebrales que sufrió cuando jugaba futbol americano, dijo la fuente que prefirió permanecer en anonimato.
“Jugamos juntos al fútbol en octavo grado. Estuvo fuera la mayor parte del año porque tenía múltiples conmociones cerebrales. Luego tuvo un par más en la escuela secundaria”.
En medios locales se publicaron fotografías donde Connor Sturgeon utiliza el casco durante los partidos de básquetbol, además de que algunos de sus compañeros de escuela mostraron en las redes sociales las imágenes de sus logros como deportista, particularmente dentro del atletismo.
El asesino den Kentucky dejó una carta
Los médicos estadounidenses han sugerido que en los últimos años se han establecido numerosos vínculos entre los jugadores de futbol americano y la encefalopatía traumática crónica (CTE), una enfermedad cerebral degenerativa causada por golpes repetidos en la cabeza, según refiere el NY Post.
Los principales problemas en la salud que produce la encefalopatía traumática son complicaciones con el pensamiento y con la memoria, además de que las personas que lo padecen son propensos a ser más agresivas con cambios constantes de humor, aunado a ataques de paranoia y depresión.
Uno de los casos sobre los problemas y consecuencias de la CTE en el deporte profesional sucedió con Aaron Hernández, el ex ala cerrada de los Patriotas de Nueva Inglaterra de la NFL, quien en 2015 fue condenado por asesinato. El atleta de alto rendimiento fue diagnosticado con la encefalopatía traumática crónica tras suicidarse dos años después cuando cumplía condena en la cárcel.
Sturgeon siguió con su formación académica y se graduó de la Universidad de Alabama donde obtuvo una maestría en ciencias en finanzas en 2020. Mientras estudiaba, Connor trabajó como pasante de verano para el Old National Bank durante tres años para finalmente formar parte de la plantilla como profesional de desarrollo comercial en 2021.
Ya como asociado de tiempo completo y como banquero, Sturgeon compartía su día a día hasta que el lunes transmitió en vivo por su cuenta de Instagram en el momento que atacaría a balazos al personal del banco. Trascendió que el ex atleta exitoso iba a ser despedido de la institución. Según CNN, Connor dejó una carta para sus padres y un amigo donde explicaba sus motivos para disparar dentro del banco, ataque que dejó 5 muertos y 6 heridos.
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