La fragilidad de los bebés es demasiada, dependen por completo de sus padres para poder sobrevivir, ellos son los encargados de brindarles amor y cuidados para que crezcan de manera adecuada, pero no todas las personas que traen al mundo a seres indefensos tienen ese compromiso, por el contrario, los descuidad, maltratan e incluso les causan la muerte. Así sucedio en el condado de Harris, en Houston, Texas, donde un pequeño de dos meses murió a consecuencia de los golpes que sus progenitores le porpinaron.
Aunque los hechos ocurrieron el pasado 2 de octubre de 2022, recientemente se dio a conocer el resultado de la necropsia practicada al pequeño Román Guerrero, el cual arrojó que el bebé tenía una fractura de cráneo que no había sanado por completo, dos aparentes hemorragias cerebrales, varias costillas fracturadas, dos laceraciones en el hígado y sangre en la cavidad abdominal; muestras claras de maltrato infantil severo.
El fatídico día en que el bebé murió, sus padres, Lionel Guerrero, de 33 años, y Yalitza Macías, de 27, dijeron que se fueron a dormir y al despertar se dieron cuenta de que el pequeño ya no respiraba, por lo que llamaron al 911. Los paramédicos del Departamento de Bomberos de Houston transportaron al bebé desde 6511 Beekman Road al Texas Children's Hospital, donde los médicos lo declararon muerto.
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Investigaciones posteriores al resultado de la necropsia identificaron a Guerrero y Macías como los principales cuidadores del bebé y el 28 de marzo ambos fueron acusados por el asesinato de su hijo de dos meses. El jueves 30 los dos sospechosos fueron arrestados por oficiales del Equipo de Supresión del Crimen del Sudeste.
Guerrero se encuentra preso en la cárcel del condado Harris y se le fijó fianza de 150,000 dólares, está programado para presentarse ante un juez el próximo lunes.Por su parte, a Macías se le fijó fianza de 100,000 dólares y está programada para presentarse ante un juez el martes 4 de abril.
Tiempo atrás, Servicios de Protección al Menor (CPS por sus siglas en inglés) había visitado la casa de Guerrero y Macías, en aquella ocasión les fue retirada la custodia de uno de sus hijos cuando tenía cuatro meses, por maltrato infantil, pues mostraba el mismo tipo de heridas que el pequeño Román presentó.
DMGS
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